¿Es diferente este IPV de Das Neves a los anteriores? ¿Aquellos eran cal y éste arena? En febrero al gobernador le hicieron firmar el Decreto 169/16, que en realidad fue un plagio de la legendaria Resolución 1044/91 que nunca cumplió Das Neves, y que ahora y después de haber reconocido en el mes de mayo que estaba vigente, las autoridades del Instituto se desdijeron e informan que habría sido derogada en el año 2012.
Este IPV es peor que los anteriores. Comete ya irregularidades varias. Sus autoridades saben que están más controladas, por los Diputados, un sector del periodismo, y la ciudadanía que empezó a conocer sus derechos, y en muchos casos intenta hacerlos valer.
Las autoridades están nerviosas, se equivocan e incluso intentan beneficiarse con lo que ocurrió en la gestión de Buzzi en la Delegación del Instituto en Comodoro Rivadavia, y se presentaron como querellantes, más que nada para salvar las apariencias.
Las anormalidades con las 81 viviendas de B° Ciudadela están siendo investigadas por la Fiscal Camila Banfi Saavedra, quien tiene un plazo de seis meses para presentar pruebas, es decir hasta la ante última semana de este mes, aunque es probable que tenga que pedir una prórroga, y si es así la causa tendría su continuidad recién en febrero de 2017.
Antes, en los primeros ocho años de Das Neves, el IPV ocultaba datos y aducían no tener centralizada la información. Ahora, después de dos mandatos completos de Don Mario, éste IPV debería tener todos los procedimientos de administración y control en condiciones de excelencia, y sin embargo no pueden dar respuestas a temas que son básicos.
¿Cómo es posible que el gobernador Das Neves desde el año 2009 viene diciendo públicamente que construyó dieciséis mil viviendas, y cuando la Cámara de Diputados pretende conocer más datos, éste IPV envíe un informe con solo 8.606 nombres? ¿Dónde están las otras y a quiénes se las dieron?
Después de varios comentarios periodísticos sobre el incumplimiento del Decreto 169/16 que se conoció gracias a muchos medios de comunicación, el IPV se allanó a cumplir con su manda, y publicó por primera vez todos los datos sobre una nómina de 16 pre adjudicatarios y 4 suplentes, para duplex en los diarios de Trelew.
A pocas horas de estar la lista expuesta en el portal del gobierno y en el sitio del IPV, los propios vecinos de Trelew empezaron a cruzar datos y detectaron diferentes anomalías, que a esta altura del desarrollo informático son imposibles de justificar.
En la página oficial del IPV si se busca en el link Adjudicatarios, se podrá encontrar las nóminas de una docena de entregas de planes a Entidades Intermedias y de Viviendas Sociales, pero cuando se solicita al Instituto que se publiquen las nóminas de todos los beneficiarios en la historia del IPV, se dice que no se puede.
Las preguntas podrían ser: ¿si los datos los tienen por qué no los quieren publicar? ¿Será para que el Pueblo no conozca los nombres de personas vinculadas al poder que habrían recibido viviendas para ellos y/o sus familiares?
Como ya se dijo, en una acción que tiende más que nada en hacer algo para salvar las apariencias, el IPV Chubut solicitó constituirse como parte querellante en la causa donde se investigan las irregularidades en la adjudicación de las 81 viviendas en Barrio Ciudadela de Comodoro Rivadavia. Irregularidades que existieron y son muy graves.
Quienes desde hace más de una década monitoreamos al IPV Chubut, no tenemos dudas en afirmar que éste IPV de Das Neves es peor que los anteriores y que seguramente hubo otros lamentables hechos como los que actualmente se investigan en Comodoro Rivadavia, y que quizás alguna vez, y es de esperar que así suceda, también lleguen a la Justicia.
Por ahora hay que esperar el desenlace del que sería un primer caso testigo. Mientras tanto y para empezar a mejorar, entre otras cosas el IPV Chubut debe abrir las puertas a la información. Información, que se presupone es pública.
Por Luis Dupuy