“Los científicos van a las Escuelas” (LCVE) es una iniciativa organizada por el Programa Nacional de Popularización de la Ciencia y la Innovación que propone la interacción entre científicos y docentes para el enriquecimiento de las clases de ciencias en el aula, mediante proyectos de colaboración centrados en las ciencias naturales: física, química, biología, astronomía o ciencias de la Tierra.
Es una dinámica colaborativa que busca incorporar Trabajos Prácticos Científicos (TPC) a la metodología que habitualmente se utiliza en clase.
Uno de los objetivos principales de LCVE es la generación de un espacio de intercambio de conocimientos entre científicos y docentes. Esto potencia el dictado de los contenidos curriculares de las materias y fomenta el pensamiento crítico en los actores involucrados en esta experiencia. Además, LCVE también promueve el conocimiento general sobre la metodología de la ciencia y busca despertar vocaciones científicas entre los jóvenes.
El proyecto debe enmarcarse en biología, química, física, astronomía o ciencias de la tierra. La temática debe formar parte de la currícula escolar y ser consensuada entre el docente y el directivo de la institución educativa. Esta decisión determinará la posterior selección del científico para garantizar su conocimiento en la materia y una adecuada planificación para el dictado del tema de interés.
Esta iniciativa está dirigida a científicos y docentes de nivel primario, secundario y/o terciarios que deseen mejorar las clases de ciencias en el aula y busquen fomentar el conocimiento científico entre sus alumnos.
Convocatoria
En Chubut, la Secretaría de Ciencia, junto al Ministerio de Educación, abrió la convocatoria del 4 al 31 de mayo para aquellos establecimientos educativos de nivel primario y secundario interesados en participar del Programa. Para ver detalles del mismos, se puede ingresar a www.ciencia.chubut.gov.ar y para consultas e inscripciones escribir a cienciachubut@gmail.com – acte.chubut@gmail.com
Se implementará el Programa en 15 establecimientos educativos, con el trabajo de 1 científico por cada uno de ellos y un científico, el número 16, encargado de coordinar el trabajo entre los mismos.