Con la mira apuntada a Vaca Muerta, YPF solamente invertirá 216 millones de dólares en este año en Chubut, cifra que significa el 6,6% de lo destinado a todo el país y que resulta menos de la tercera parte de lo volcado en los yacimientos chubutenses en 2009 cuando invirtió 665 millones de dólares. Las cifras son evidentes, ya que la inversión en Chubut representa apenas el 10% de los 2.012 millones de dólares que YPF destinará a los no convencionales neuquinos.
Según publica El Extremo Sur, atrás quedaron las épocas históricas del descubrimiento del petróleo en Comodoro, de la impronta del Estado para desarrollar la ciudad, y del insoslayable peso productivo y social que supo tener la YPF estatal del General Enrique Mosconi. Son solo recuerdos que no inspiran en lo más mínimo a Macri y a su versión CEOcrática de YPF, y que indudablemente no volverán a hacerse realidad en la región.
Hace poco tiempo, la compañía energética de mayoría estatal llevó a un grupo de periodistas comodorenses a visitar Vaca Muerta. YPF consumó así un gesto irónico, al pedirle a los cronistas chubutenses que relaten el milagro neuquino y cuenten maravillas de esa provincia ante la mirada empobrecida de quienes penan en la Cuenca del Golfo San Jorge. Esos mismos periodistas fueron colocados en Manantiales Behr dentro un incómodo corralito, condenados al silencio y el destrato. Nada de contemplaciones para la prensa “libre”.
De molinos y molineros
Sin decir una sola palabra sobre los casi 6.000 despidos petroleros que se produjeron en los últimos tres años en la Cuenca del Golfo San Jorge, ni tampoco esbozar ningún anuncio prometedor sobre las inversiones de la petrolera con mayoría accionaria estatal para desarrollar con mayor potencia la producción petrolera convencional en Chubut, el presidente se volvió a subir al helicóptero para bajar en el Liceo y visitar la panadería “El Artesano”, ubicada en la Avenida Roca al 300.
Llamativamente, esa misma panadería había sido visitada por el actual diputado nacional Gustavo Mena en su campaña legislativa. O el pan es muy bueno o el comercio está marcado con rojo en la tablet de los chicos de marketing del PRO.
Durante la charla con Macri, el comerciante Claudio Vásquez le hizo saber de los problemas por los que atraviesa el rubro. “Hablamos de los valores de la harina, me preguntó de cuánto fue el aumento, yo le dije del 400%”, relató el panadero, y reveló que el mismísimo Presidente la consultó: “¿Vos por qué crees que aumentó tanto?”; a lo que el panadero respondió que “al abrir las exportaciones descuidamos el mercado interno, y me dijo es un tema que él iba a ver. Esperemos que sirva de algo”.
Cuanto menos llama la atención que el Presidente no supiera del aumento de la harina que disparó el precio del pan en Comodoro y en todo el país, pero más desconcertante sonó que Macri le preguntará por los motivos del 400% de suba en la bolsa de harina. De todos modos, el guión no es muy diferente al que usó para responderle a Mirtha Legrand cuando lo arrinconó con la pregunta sobre el valor que tenía una jubilación mínima. La gran pregunta es qué va a hacer el primer mandatario con lo que explicó el panadero. Nada fuera del marketing, seguramente.
El hombre virtual
Macri pasó por Comodoro, pero no “pasaron cosas”. Se marchó dejando como saldo una inauguración poco prometedora en el análisis macro de la economía regional, un “timbreo” que debería generarle más que preguntas, y abandonó la ciudad sin hacer un solo anuncio importante para la recuperación económica y social de un pueblo en el que sus habitantes que vienen dando desde hace más 110 años algo más que el sudor de su frente –y la riqueza de su suelo- al crecimiento del país y el disfrute de la Cabeza de Goliat.
El Comodorense