Como si se tratara de una procesión en busca de la gloria, los hinchas de Boca improvisaron un banderazo en la previa de la revancha de la Superfinal de la Copa Libertadores ante River.
Del mismo modo que ocurrió el día que debían jugar en el Monumental, miles de fanáticos se reunieron en las inmediaciones de la Bombonerita para apoyar al plantel liderado por Guillermo Barros Schelotto.
Con cánticos en contra del Millonario y el recuerdo permanente por el descenso que atravesó el conjunto de Núñez, los simpatizantes también llenaron de color los alrededores del Alberto J Armando. Las banderas del color azul y oro, junto algunas bengalas, completaron las escenas de los fans que se ilusionan con la séptima conquista continental.
El micro con los protagonistas partió de Casa Amarilla cerca de las 23 y dentro de su recorrido a Ezeiza pasó por Parque Lezama, donde los hinchas se autoconvocaron para acompañar a la delegación boquense.
Boca y River disputarán el trofeo más codiciado del continente en el Santiago Bernabéu, un escenario atípico para la definición. El próximo domingo, los xeneizes y los integrantes de la Banda paralizarán al planeta en busca de la convulsionada Copa Libertadores.
Más temprano, se originó un llamado al 911 con una amenaza de bomba en la Bombonera, donde trabajaron efectivos de la División Explosivos de la Policía de la Ciudad. Tras la investigación que se desarrolló en el estadio, el resultado fue negativo y en la tarde los hinchas se reunieron sin generar ningún incidente.
La delegación que formó el Mellizo, con 24 jugadores, partió en la madrugada rumbo a la capital ibérica en vuelo chárter para concentrarse definitivamente el partido más importante de la historia del fútbol argentino.