El ex canciller ultraderechista israelí Avigdor Lieberman le dio hoy la espalda a su antiguo socio, el primer ministro en funciones y encargado de formar gobierno, Benjamin Netanyahu, a quien insistió que solo apoyará un eventual Ejecutivo de unidad en que participen tanto él como la coalición Azul y Blanco que encabeza Benny Gantz.
«La fórmula correcta es crear una base común entre (los partidos) Israel Nuestro Hogar, Likud, y Azul y Blanco. Solo entonces discutiremos la división de carteras y la rotación del primer ministro», declaró Lieberman en un comunicado, tras reunirse con Netanyahu.
La de hoy fue la primera reunión bilateral que mantienen ambos tras las elecciones del pasado 17 de septiembre, en las que el líder ultraderechista logró 8 escaños y una de las llaves de la gobernabilidad, pero que insiste en un gobierno conjunto y en alejar del poder a los partidos ultraortodoxos, tradicionales socios de Netanyahu.
Aunque Gantz obtuvo un escaño más que Netanyahu fue apoyado sólo por 54 diputados de la Kneset (Parlamento), de los cuales los diez del bloque árabe anunciaron que no estarán en su gobierno, por lo que el presidente Reuven Rivlin nominó a Netanyahu, que -aunque escasas- tiene más opciones de llegar a los 61 necesarios.