La presidenta de facto envió un proyecto para establecer un debate público y obligatorio entre los candidatos a la jefatura del Estado.
La presidenta de facto de Bolivia, Jeanine Áñez, envió a la Asamblea Legislativa Plurinacional un proyecto para establecer un debate público y obligatorio entre los candidatos a la jefatura del Estado, a partir de una modificación de la ley de Régimen Electoral.
«Mediante esta propuesta de ley, el Gobierno constitucional que presido quiere apoyar una vez más al fortalecimiento de la democracia informada; por esta razón este proyecto de ley propone el debate obligatorio entre candidatos», explicó la mandataria.
Según el documento, el cambio dispone la obligatoriedad del debate entre candidatos a la presidencia y vicepresidencia y la presentación de programas de gobierno, “en el marco de la transparencia e igualdad de oportunidades previstas en los principios, valores y fines constitucionales”, reportó la estatal agencia ABI.
Además, establece que los debates deberán ser exclusivos y transmitidos de manera obligatoria en directo por los medios de comunicación del Estado, a disposición de los medios privados para su transmisión simultánea si lo quieren.
Áñez manifestó que «el debate electoral no es un derecho de los candidatos a la presidencia y a la vicepresidencia, sino una obligación de la democracia que se nutre de la libertad y la libertad, para ser responsable, requiere de información».
«La información otorga poder y en este marco los bolivianos tenemos derecho a participar y supervisar los procedimientos para el ejercicio de la democracia y por otra parte todos los ejercicios para la democracia deberán ser necesariamente públicos», afirmó.
El cuadro electoral apenas se insinúa por ahora en Bolivia, donde el MAS de Evo Morales resolverá su candidato este mes en un congreso, y donde ayer quedó sellada una alianza entre los cívicos Luis Fernando Camacho y Marco Antonio Pumari para disputar la compulsa bajo un acuerdo denominado “Por una Bolivia Unida, con Dignidad, Libertad y Democracia”.
«Hemos determinado consolidar nuestro binomio electoral para las próximas elecciones generales del 2020-2025 de la siguiente manera: Luis Camacho a la presidencia y Marco Pumari a la vicepresidencia», dice el acuerdo político de los dos dirigentes, señalados entre los promotores del golpe que sacó del poder a Morales, tras la polémica por las elecciones de octubre.
Como ni Camacho ni Pumari están enrolados en ninguna fuerza, los dos aparecen abiertos a que los postule “cualquier tipo de alianza, movimiento ciudadano o partido político, previo consenso mutuo”.
El diario El País de España señala que “varias agrupaciones políticas menores ya se habían prestado a dar forma legal a la candidatura de los ‘vencedores de Evo’”.
Se descuenta que el ex presidente Carlos Mesa y el empresario Samuel Doria Medina también buscarán presentarse a los comicios, que por ahora no tienen fecha, señaló Télam.