Primero se acercó el técnico Miguel Ángel Russo y Maradona se levantó de su poltrona para ir a abrazarlo. Diego hacía pucheros en cada encuentro, parecía desbordado de la emoción. Luego, cuando ingresaron los jugadores de Boca, varios fueron a saludar DT de Gimnasia, hubo un largo abrazo y sonrisas cómplices con Wanchope Ábila , después con el colombiano Sebastián Villa y finalmente llegó el turno de su gran amigo Carlos Tevez. Cuando se acercó Apache, Diego se levantó y se dieron un pico y un abrazo muy sentido.
Maradonismo en estado puro . Diego vivió con las pulsaciones a tope cada minuto desde que pisó el césped del Alberto J. Armando, a las 20:27. Fueron muchas las emociones antes del partido. Luego hubo muchas más con la coronación boquense, en un final para el infarto.