Los ocho rugbiers que permanecen detenidos acusados de asesinar a Fernando Baez Sosa (18) a la salida de un boliche en Villa Gesell fueron trasladados a la alcaidía de Melchor Romero, a 20 kilómetros del centro de La Plata. Según confirmaron a Clarín fuentes del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB), llegaron desde la Unidad carcelaria de Dolores en la noche del jueves y permanecerían en este nuevo lugar de alojamiento mientras se les realizan pruebas que deberán llevar a cabo especialistas de la Asesoría Pericial de la Suprema Corte bonaerense.
»La intención es favorecer el contacto con otros internos asegurando su integridad física pero sin privilegios», confió a este diario una fuente judicial. En Melchor Romero los ocho imputados compartirán celdas de a dos y se integrarán en las distintas actividades que allí se desarrollan.
El pedido lo hicieron las autoridades de la Unidad Penal 6 de Dolores, donde los acusados estuvieron alojados desde finales de enero. Pero allí las condiciones eran otras: estaban aislados del resto de la población carcelaria. «No podían continuar sin espacio para moverse», fue el argumento con el que el juez de Garantías 6 de Villa Gesell, David Mancinelli, dispuso el traslado que desde la UP6 de Dolores se realizó con absoluto sigilo.
A la vez, según explicaron fuentes penitenciarias, el nuevo lugar de detención se decidió «para facilitar el traslado a cada una de las sesiones o convocatorias que hagan los médicos que los evaluarán.
La alcaidía de Romero está situada en 520 y 176. Forma parte de un complejo penitenciario que incluye otras unidades. Es para detenciones transitorias. Quienes permanecen detenidos allí habitualmente lo hacen solo hasta que la Justicia determina su situación procesal.
En el caso de los jóvenes de Zárate imputados por la golpiza que terminó en la muerte de Fernando en la madrugada del 18 de enero, se quedarán en el lugar al menos hasta que completen las pericias psiquiátricas que se harán a partir de abril en la asesoría que está en la zona del barrio Hipódromo de la capital bonaerense.
Pero antes, la Cámara de Apelaciones y Garantías de Dolores deberá resolver la situación procesal de Máximo Thomsen (20), Ciro Pertossi (19), Luciano (18) y Lucas Pertossi (18), Enzo Comelli (19), Matías Benicelli (20), Blas Cinalli (18) y Ayrton Viollaz (20), que están con prision preventiva por el homicidio doblemente agravado, por premeditación y alevosía, de Fernando Báez Sosa.
La cuestión comenzará a resolverse la semana próxima, en Dolores, en una audiencia convocada por los camaristas. Allí la fiscal, los querellantes y la defensa expondrán sus argumentos para que el Tribunal confirme o no las preventivas dictadas por el juez Mancinelli. Esa mañana, el próximo jueves, los detenidos regresarán a Dolores: tienen que estar presentes.
Desde hace unos días, los directivos de la alcaidía de Romero comenzaron a «acondicionar» un pabellón para la llegada de los imputados. Se dispuso el reacomodamiento de espacios para que puedan estar en sectores cercanos. Y se pusieron en condiciones cuatro celdas para que cada una sea ocupada por dos de los acusados del crimen de Fernando.
Comienza una nueva etapa para los detenidos, quienes a partir de ahora tendrán contacto con el resto de los reclusos.