Una de las vecinas que con sus hijos fueron víctimas de la brutalidad policial la madrugada del lunes pasado en el barrio INTA de Trelew; la noche del día siguiente no pudo dormir por miedo a que le hicieran algo en su casa. Veía con mucha desconfianza desde adentro de su domicilio a unos policías que justo se fueron a parar al frente y la presencia de ellos la intimidaba.
Es curioso, pero alguien que debía darle seguridad originaba en ella la sensación contraria y eso lo logró el cuestionado ministro de Seguridad Federico Massoni, quien en las últimas horas a través de sus “medios amigos” volvió a mentirle a la ciudadanía.
Massoni dijo públicamente, en una pseudo-conferencia de prensa, que se iba a hacer una investigación de los hechos ocurridos en INTA “para deslindar responsabilidades”, pero nadie le preguntó que hacía él participando y hasta dirigiendo el brutal operativo.
En consecuencia, si se tendría que investigar para clarificar de quién fue la responsabilidad del ataque indiscriminado y bestial contra los vecinos de INTA, él debería ser el primero al que deberían sumariar y denunciar ante la Justicia. Además de –obviamente— sus edecanes y cómplices; los que manejan a la policía, los hermanos Miguel y Paulino Gómez.
La mujer que no pudo dormir sintiéndose intimidada e insegura, por la presencia de policías apostados al frente de su casa durante gran parte de la madrugada del martes pasado, reveló que una forma que tienen ellos de intranquilizar al vecindario y de provocar para tener alguna excusa para llevarse a alguien detenido, es efectuando disparos al aire.
Durante la noche se para un grupo de tres o cuatro uniformados en una esquina y allí empiezan a tirar balazos al aire, lo cual, lógicamente, alarma a la gente que llama al 101 avisando que en el barrio andan a los tiros.
Así, siempre según el testimonio de esta mujer y de otros vecinos del sector, salen literalmente a cazar y aquellos que andan en la vía pública pagan las consecuencias de algo que no hicieron. Ni hablar si intentan resistirse a ser llevados demorados a la comisaría o quieren darse a la fuga.
Así actúa “la maldita policía” de Massoni y si el gobernador Arcioni o la Justicia no ponen límites a este desquiciado accionar en cualquier momento, por cómo está el ambiente en los barrios de Trelew, va a ocurrir una desgracia. Desde este portal lo venimos advirtiendo desde hace ya varios días. La gente está cansada del atropello, la violencia y el autoritarismo.
Y Massoni, a todo esto, ya no sabe qué hacer para que la gente piense que él es “el salvador”. A veces asustan sus actitudes, hacen acordar a aquellos tiranos que pagaban para que hablaran bien de ellos. Su gestión, una vez que sea destituido quizás, y se vaya del poder de madrugada y por la puerta de atrás; tal vez hasta esposado, va a ser recordada por mucho tiempo como la que enfrentó al pueblo con la policía. Lamentablemente.