Un remisero de Esquel tuvo que ser forzado a realizar el aislamiento obligatorio luego de transportar a varias personas procedentes de zonas de riesgo por circulación de coronavirus. Una consigna policial quedó apostada afuera de su domicilio de Hermanos Paredes entre Lezana y Galina.
Fue detectado tras ingresar por la portada con la mujer de un comerciante de la ciudad y sus dos hijos, provenientes de Buenos Aires. Hoy lo vieron circulando en el vehículo, que además tiene vidrios polarizados, algo prohibido para un remís.
Según se conoció, tenía habilitación en Gobernador Costa y trabajaba en Esquel. Para no hacer el aislamiento apagaba el celular y de esa manera evitaba ser contactado por el Área Programática. Mientras tanto, continuaba realizando viajes que ofrecía por redes sociales.
Intervino el Ministerio Público Fiscal y se le labró la actuación correspondiente por desobediencia. Asimismo, permanecerá bajo custodia policial hasta el 9 de julio.