El perito Amilcar Fleita, de parte de la querella en la causa que investiga el crimen del empresario Fabián Gutiérrez, reconstruyó el desarrollo de los hechos sobre la base a su hipótesis y aseguró que al menos tres personas participaron del ataque contra la víctima, la agresión que duró “aproximadamente entre tres y cuatro horas”.
Luego de recibir el informe definitivo de la autopsia, Fleita, contratado por la familia de Gutiérrez, sostuvo “en criminalística nosotros decimos que las evidencias nos hablan y en este caso el cuerpo habló y confirmó la hipótesis de la querella”.
Según contó, la víctima ingresó a la casa de la localidad santacruceña de El Calafate donde fue hallado enterrado “junto a una persona que se aprovechó de un momento de descuido de Gutiérrez y lo sorprendió con un golpe por detrás con la finalidad de adormecerlo”. Momentos después el empresario “recobró el conocimiento y logró correr y resguardarse en el baño”.
Dos personas más llegaron al lugar y rompieron la puerta del baño. Luego ataron a Gutiérrez a una silla y lo comenzaron a torturar. “Es evidente que existió una maniobra de sujeción de Gutiérrez a través de precinto, hubo también una maniobra de asfixia mediante la utilización de un cable”.
Fleita dijo que uno de los sujetos asfixió a Gutiérrez ubicándose por detrás de él, mientras al menos otros dos lo agredían por delante, “uno de ellos a golpes de puño y otro con un arma, como puede ser un palo o garrote”.
Con respecto a los cortes que presentó el cadáver, Fleita indicó que se trataron de “lesiones punzo cortantes en estado agónico”, por el poco sangrado.
“Eso quiere decir que la víctima estaba falleciendo. Mi hipótesis es que los victimarios creyeron que aún estaba vivo y quisieron asegurarse la muerte, entonces le propinan cinco estocadas en el cuello a través de un arma blanca”.
Gutiérrez, exsecretario Cristina Fernández, fue asesinado el 4 de julio y enterrado en los fondos de una casa de la calle Cañadón Seco, del barrio Aeropuerto Viejo, a unos 250 kilómetros de Río Gallegos.