La tormenta tropical Delta se formó en el Caribe en la mañana de este lunes y se fortaleció rápidamente a huracán categoría 1, con vientos de 120 kilómetros por hora. Delta se dirige a la costa central del Golfo y podría impactarla a finales de esta semana.
Esta es la segunda vez que se utiliza la letra griega Delta para una tormenta con nombre. La última vez fue el 15 de noviembre de 2005.
Al anochecer, Delta se había fortalecido en 64,3 kilómetros por hora desde las primera horas del día. La intensificación rápida en los sistemas tropicales se define como más de 56 km/h de fortalecimiento en 24 horas.
Un cambio hacia el oeste
Si Delta continúa intensificándose rápidamente podría llegar a ser un huracán mayor. Es decir de categoría 3 o más, para cuando se acerque a la península de Yucatán en la noche de este martes.
Un cambio hacia el oeste en el pronóstico a corto plazo significa que ahora es más probable que la tormenta golpee el extremo norte de la península de Yucatán que el oeste de Cuba. Aún así, ambos se verán afectados por intensas lluvias, fuertes vientos y marejadas ciclónicas entre la noche del martes y la madrugada del miércoles.
Este cambio hacia el oeste llevó al gobierno de México a emitir una advertencia de huracán para la costa de la península de Yucatán desde Tulum hacia el norte y hacia el oeste hasta Río Lagartos, incluido Cozumel.
Se mantiene una alerta de huracán para el oeste de Cuba, mientras que una advertencia de tormenta tropical está vigente para las Islas Caimán.
Se espera un mayor fortalecimiento en los próximos días. En ese sentido, también que Delta sea un gran huracán cuando ingrese al sur del Golfo de México.
Delta podría tener una «intensificación robusta»
Podría ocurrir «alguna intensificación robusta», indicó el Centro Nacional de Huracanes.
«Aunque el aire ha sido más frío y seco en el Golfo de México últimamente, el agua todavía está muy caliente y con un potencial de crecimiento explosivo para Delta», detalló el meteorólogo de CNN Chad Myers.
Pero condiciones ambientales menos favorables podrían evitar que Delta se convierta en un huracán importante, de categoría 3 o superior, cuando llegue a Estados Unidos.
La cortante del viento ––es decir, el cambio de la velocidad y dirección del viento con altura–– y el agua ligeramente más fría sobre el norte del Golfo de México podrían limitar la fuerza de Delta a fines de esta semana.
«La mayoría de los modelos reducen la intensidad de Delta a medida que se acerca a la costa del Golfo, pero si Delta se convierte en un gran huracán durante un tiempo, la marejada ciclónica seguirá siendo una gran amenaza incluso si la velocidad del viento disminuye», añadió Myers.
«Aunque todavía existe una incertidumbre significativa con respecto a la intensidad de Delta cuando se acerque a la costa norte del Golfo, es cada vez más probable que el sistema represente una amenaza importante de vientos y marejadas ciclónicas en una parte de esa área», según el Centro Nacional de Huracanes.
Las tormentas Delta y Gamma podrían interactuar
Pero hay otra variable que los meteorólogos vigilan: la interacción de Delta con Gamma, que todavía se desplaza al norte de la Península de Yucatán.
Esto hace que predecir el camino de Delta sea un poco complejo.
«La interacción con la tormenta tropical Gamma o sus remanentes, que podría resultar en un brusco giro hacia el oeste, después de lo cual podría ocurrir un giro brusco hacia el noroeste», indicó el Centro Nacional de Huracanes.
El cono de pronóstico del Centro Nacional de Huracanes se extiende desde la frontera de Texas y Louisiana hasta el oeste de Florida. La proyección está centrada en el este de Louisiana. Si Delta toca tierra en Estados Unidos, será la primera vez que una tormenta con letra griega lo haga en el país.