Una flota clandestina compuesta por unos 300 Pesqueros de origen chino se encuentra a la altura de Perú y se acerca a Chile, según denunció la organización Oceana al advertir sobre una intención de «saquear los recursos naturales» de los mares que bañan las costas de Latinoamérica.
«Consternación mundial causó la presencia de alrededor de 300 barcos chinos que durante julio y agosto se posicionaron alrededor del Parque Nacional Galápagos de Ecuador, con el fin de realizar actividades pesqueras que, por su magnitud, pusieron en alerta a las máximas autoridades de América del Sur», recordó la organización.
Advirtió que «pese a haber dejado la zona, esta misma flota sigue su ruta por Sudamérica y, de acuerdo con recientes análisis de imágenes satelitales, se evidenció que ya se encuentran al límite de la Zona Económica Exclusiva (ZEE) de Perú y a 400 millas náuticas al noreste de la ZEE de Chile, en probable dirección al país».
Oceana analizó las rutas de navegación de los pesqueros a través de la plataforma Global Fishing Watch, en la cual se pudo detectar a un total de 126 embarcaciones que, aparentemente, pescaron durante 23.896 horas, desde el 14 de agosto hasta el 19 de septiembre entre Ecuador y Perú.
Desde la organización de conservación marina explican que la reducción en el número de embarcaciones no respondería al retiro de algunos de estos barcos, sino más bien a acciones irregulares.
«De acuerdo con los últimos datos, podemos observar que el número de embarcaciones disminuyó desde 300 a 126; sabemos que estos barcos no desaparecieron y se ve pocos de ellos abandonando el área. El tamaño de esta flota debería ser motivo suficiente de preocupación y, aún más, cuando es probable que estén apagando sus sistemas de identificación automática», afirmó Marla Valentine, Analista de Pesca Ilegal y Transparencia de la oficina de Oceana en Estados Unidos.
La analista, según apunta el informe publicado por Oceana, también explica que se observa una mayor cantidad de transbordos en el último mes, lo cual podría ser un indicador de que los barcos han aumentado su esfuerzo pesquero a medida que navegan hacia el sur.
Con el transbordo, los barcos descargan sus capturas y continúan su actividad pesquera sin necesidad de entrar en ningún puerto.