El secretario de Estado, Mike Pompeo, indicó que «las complejas restricciones internas» que regulaban los contactos de parte de diplomáticos, miembros de las fuerzas armadas y otros con Taiwán habían sido impuestas «en un intento por apaciguar al régimen comunista en Pekín», pero «ya no más».
A doce días del traspaso del mando presidencial, Estados Unidos eliminó restricciones vigentes desde hace décadas para el contacto oficial con Taiwán, anunció el secretario de Estado Mike Pompeo en un comunicado.
Pompeo dijo que «las complejas restricciones internas» que regulaban los contactos de parte de diplomáticos, miembros de las fuerzas armadas y otros con Taiwán habían sido impuestas «en un intento por apaciguar al régimen comunista en Pekín», pero «ya no más», reportó la agencia AFP.
La declaración, que se produjo en las últimas dos semanas del gobierno de Donald Trump, seguramente generará una reacción de China, que considera a Taiwán como una provincia rebelde y se ha esforzado por aislar a la isla del resto del mundo.
Pompeo se reunión ayer, por primera vez, con Tony Blinken, quien fue designado por el presidente electo, el demócrada Joe Biden, para ocupar el cargo de secretario de Estado, para facilitar así una transición de poder «ordenada».
Pompeo explicó en su cuenta de Twitter que el objetivo de la reunión es «garantizar que los intereses de los estadounidenses están protegidos en el exterior». Pero nada se dijo en la información de esa reunión sobre que se hubiera abordado el tema Taiwán.
Taiwán fue el refugio de los nacionalistas chinos que fueron derrotados por las fuerzas comunistas en 1949.
No quedó claro el significado de la medida en la práctica, aunque Pompeo dijo que todas las comunicaciones del Ejecutivo con la isla se harán por medio del Instituto Estadounidense en Taiwán (AIT por sus siglas en inglés), propiedad de Washington y que funciona como una embajada de hecho.
El presidente Donald Trump ha enviado varios funcionarios a Taipei en el último año, incluso cuando chocaba con China en diversos temas, desde el manejo de la pandemia de Covid-19 hasta pujas sobre comercio, seguridad y derechos humanos.
El comunicado de Pompeo se produjo además dos días después de que el gobierno chino advirtiera a Estados Unidos sobre un «alto precio» a pagar si prosigue con los planes de enviar a su embajadora ante Naciones Unidas, Kelly Craft, a la isla la próxima semana.
La visita de tres días de Craft está planeada para una semana antes de la asunción de Joe Biden como presidente de Estados Unidos, por lo que se sumará a una serie de dolores de cabeza diplomáticos que enfrentará el nuevo mandatario.
«Estados Unidos pagará un alto precio por su acción equivocada», dijo China. «Urgimos fuertemente a Estados Unidos a detener esta loca provocación, a que pare de crear nuevas dificultades para las relaciones China-Estados Unidos, y detenga su marcha por el camino equivocado», fue el mensaje.
Un comunicado emitido en Washington indica que la visita de Craft «reforzará el fuerte y continuado apoyo del gobierno de Estados Unidos al espacio internacional de Taiwán».
Estados Unidos reconoció a China en 1979 bajo la Presidencia de Jimmy Carter (1977-1981), pero al mismo tiempo creó la AIT y ha mantenido una fuerte alianza con la isla.
El gobierno es obligado por el Congreso a venderle armas de autodefensa y se opone a cualquier uso de la fuerza por parte de China.
Aviones militares chinos realizaron 380 incursiones en el espacio aéreo taiwanés en 2020, un récord.