Durante la pandemia por el Covid, el sector agropecuario en nuestra provincia siguió trabajando y se vio más golpeado por efectos denominados secundarios, más que por los relacionados con la pandemia misma. En tanto que para el 2021 el sector espera un año difícil, y pide que se trabaje en políticas que den previsibilidad en cuanto al horizonte de costos y precios para poder planificar.
El presidente de la Sociedad Rural Valle del Chubut, Ricardo Irianni, habló en FM EL CHUBUT comentando sobre cómo finaliza el año el sector agropecuario, señalando que «comparado con rubros como la hotelería, gastronómico, comercio, y el turismo, el agropecuario al menos pudo seguir trabajando, tranqueras adentro, porque en marzo cuando se hizo el decreto con el cuidado por la pandemia, el sector agropecuario, con todas las dificultades, limitaciones que se han tenido a lo largo de todo el año, hemos podido seguir trabajando».
Dijo, que los efectos del sector agropecuario, «podemos decir que son efectos secundarios de la pandemia, en cuanto a lo que ha afectado al comercio. Ponemos como ejemplo el precio internacional de la lana, medidos en dólares, cayó a niveles muy bajos, cayó entre un 30 y 40%, y eso afecta directamente al bolsillo del productor y la baja de rentabilidad; si bien se recuperó la segunda época del año. Cuando hablamos del sector agropecuario, hablamos de la agricultura, frutihorticultura, el sector de la lana, la ganadería intensiva, y dentro de cada uno esta la escala de producción, los pequeños, medianos y grandes, que han sido afectados de distinta manera», describió.
Con respecto al productor de la meseta, «hay muchos campos que se han cerrado por distintos motivos; por el tema de la sequía, que a eso se suma el precio de la lana, los predadores. Hay preocupación en el campo, quizás, más por estos efectos secundarios de la pandemia, que por la pandemia en sí», diferenció.
PANORAMA PARA ESTE AÑO
En cuanto al panorama para el 2021, vaticinó que será «difícil, pero va a encontrar a la gente trabajando», y en ese sentido pidió un sinceramiento «en cuanto a una política nacional consistente que permita dar rentabilidad y previsibilidad en el mediano y largo plazo.
Desde el gobierno nacional se han priorizado otras cosas, dar incertidumbre en cuanto a lo que es un horizonte de hacia dónde va la economía, y en la producción agropecuaria, como en tantas otras, tiene que haber previsibilidad en cuanto al horizonte de costos, precios para poder planificar».
Fuente: El Chubut