El supuesto “inicio del debate” sólo fue una puesta en escena para poner punto final y cumplir el capricho de imponer la megaminería trasnacional en Chubut, sin licencia social y en contra de lo que indican los sectores científicos y académicos.
Mientras los aliados hacían la pantomima, Arcioni, Sastre y Eliceche se fotografiaban con Sergio Massa en Buenos Aires. El verano y la pandemia como última chance de los promineros para imponer la zonificación antes de que lleguen las elecciones y antes de que se cumpla el plazo legal para el tratamiento de la Segunda Iniciativa Popular.
Según indicaron medios como Jornada y Metadata, el gobierno buscaría aprobar la zonificación este jueves 28 de enero. Si bien hasta que no esté convocada no se puede esperar nada confiable de políticos operadores de las mineras, existe la posibilidad de que reuniendo 14 bancas, se convoque a una sesión extraordinaria. En pocos meses se cumple el plazo legal para que la Legislatura deba tratar un proyecto presentado por iniciativa popular avalado por 30.916 firmas (el doble del porcentaje mínimo que estipula la Constitución Provincial). En lugar de respetar el proyecto popular, gobierno nacional, provincial y mineras buscarían aprobar un proyecto completamente opuesto: en enero, con una sesión extraordinaria, en plena pandemia y de manera virtual. Si a esto le agregamos que gran parte de quienes lo llevarían a cabo, en elecciones prometieron lo opuesto, podemos comprobar que de democracia sólo ha quedado el nombre. Mientras tanto en Canadá, siguen de cerca la política chubutense y Pan American Silver le indica a sus accionistas que con la zonificación, a más tardar en un año comenzaría la construcción del Proyecto Navidad.
El debate que no fue
Finalizó la semana de “mesas de trabajo” en donde se suponía que distintos sectores sociales participarían de un “debate” sobre el proyecto de ley del ejecutivo. Nunca se puso en discusión el proyecto, sino que desde el principio estaba convocado para “buscar aportes para mejorar el proyecto”. Así fue que se ignoró la Iniciativa Popular y a quienes la impulsaron, se bajaron todos los sectores que no son promineros, fueron exposiciones cerradas con preguntas al final (por parte de quienes ya de antemano buscan imponer la megaminería) y los únicos medios que “la cubrieron” son quienes se dedican a reproducir gacetillas oficiales, recibir pauta del gobierno y plata de las mineras. El resto, no pudo acceder y se dedicó a mostrar la otra cara, la de los actores sociales, políticos, académicos y científicos que se diferenciaban de la convocatoria denunciando la truchada.
La semana pasada, tras enterarse por los medios de que eran parte de las jornadas, distintos sectores se posicionaban o adelantaban sus probables posturas (leer más acá). La sorpresiva convocatoria, cerrando la primera quincena de enero, imposibilitaba una participación genuina de sectores que podrían haber acudido a manifestar una posición sobre un tema que se debate en la provincia hace más de 18 años.
Esta semana, la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco le respondió a Arcioni que este tipo de convocatorias deberían ser el inicio de un proceso de debate, y que este primer llamado formal que se le hace a la universidad requerirá un tiempo prudencial para poder remitirle una opinión institucional,dado que el funcionamiento interno de una universidad nacional requiere la deliberación y el debate de los distintos claustros en los órganos de cogobierno. Pese a ello, en el comunicado le recuerdan al gobernador que “la UNPSJB se ha expresado en numerosas oportunidades sobre los proyectos de zonificación minera, manifestando que la preservación del agua y demás recursos ecosistémicos, la protección de la biodiversidad y el resguardo del patrimonio natural y cultural son aspectos indisociables e inherentes a estrategias para construir una matriz productiva diversificada que permita a nuestro territorio dejar paulatinamente el perfil extractivista de la economía chubutense”.
Por su parte, la Universidad Tecnológica Nacional – Facultad Regional Chubut también respondió a la convocatoria de Arcioni. En un comunicado con la firma de su decana, la ingeniera Diana Bohn, indican que “la participación colaborativa que requiere este tipo de proyectos debe ser planteada desde el inicio del proceso, y no sólo a fin de emitir opiniones sobre proyecto ya definidos”. La institución decidió no participar de la jornada y se mostró a disposición para trabajar en políticas públicas provinciales de desarrollo integral con el agua como punto de partida, para garantizar un futuro próspero para toda la provincia.
También desde el IPCSH-CONICET decidieron a través de su Consejo Directivo declinar la convocatoria a participar “en concordancia con otras instituciones científicas […] en virtud de la celeridad que se le busca imprimir a un debate que, por su relevancia, requiere mayores plazos de tiempo y una convocatoria amplia a otros sectores de la comunidad. La invitación al sector científico se da en un proceso avanzado del tratamiento legislativo, y no en sus fases iniciales” indican, y agregan: “Esta convocatoria es informativa, con una modalidad que solamente permite la realización de preguntas sobre aspectos de una decisión que, a nuestro entender, ya ha sido tomada”.
Trabajadorxs de Ciencia Chubut volvieron a expresarse con un comunicado en el que solicitaron un derecho a réplica y una rectificación a distintos medios provinciales (El Chubut, El Patagónico, ADN Sur) quienes habían indicado que el gobierno se reunió con representantes académicos y científicos de Chubut. “Todas las instituciones universitarias y científico-tecnológicas de la provincia objetaron el PL 128/20 y pidieron que sea retirado de la legislatura provincial” expresan en el comunicado, y agregan: “aclaramos que a pesar de que un grupo reducido de profesionales del sector asistió a la mesa a título personal, las instituciones científicas de Chubut no avalan el proyecto de zonificación minera”.
En contraposición a lo que indican los medios de comunicación sostenidos por la criminal pauta oficial del gobierno provincial, quienes trabajan en espacios académicos y de ciencia se han reunido desde abajo y han reafirmado su negación a la imposición de la megaminería. Se trata de un grupo constituido a partir de la nota consensuada y presentada en la Legislatura Provincial en noviembre del 2020, cuyos contenidos y avales están plasmados en este enlace: bit.ly/3p72fBP. Quienes sí participaron, son investigadores y técnicos ligados a la actividad megaminera, sobre los cuales se puede conocer más en esta nota de Con Sello Patagónico.
Comunidades originarias de la meseta centro norte (el territorio a sacrificar según el proyecto de zonificación) reafirmaron su posición, reclamaron la Consulta Previa, Libre e Informada y repudiaron las “mesas de trabajo”. Son las comunidades Mallín de los Cual, Los Pino, Ñuke Mapu de El Escorial, Laguna Fría – Chacay Oeste y Yalalaubat quienes también exigieron que se retire el proyecto de ley 128/20 y que se trate y apruebe sin modificaciones la Segunda Iniciativa Popular.
Desde Greenpeace Argentina acusaron a Arcioni de armar un debate falso: “Los chubutenses no van a dejar que Arcioni Mariano siga poniendo presión para obligarlos a exponer su agua. El debate estuvo caracterizado por reunir sectores afines a la minería” expresaron, y agregaron:”el río Chubut está en juego, en una provincia donde ya falta el agua y se hacen cortes en varias localidades”.
La UCR , a través de su presidenta Jacqueline Caminoa, rechazó el llamado a las “mesas de trabajo” y reclamó que se les llame para discutir otros temas más importantes para la provincia. La Mesa de Conducción del Partido Justicialista de Chubut expresó que “no formará parte de esta aceleración de tiempos sin formas para sacar una Ley que acredite, sin un análisis profundo y participativo, otra forma más de extractivismo de los recursos naturales sin agregado de valor y con pésimas condiciones que solo buscan mayor deterioro de la calidad de todos en beneficio de pocos”. El Bloque de Diputados, Intendentes, Legisladores Municipales y Nacionales de dicho espacio no participó de las jornadas, con la excepción del diputado Carlos Eliceche, que estuvo junto a Arcioni y Sastre en la gira por la capital nacional pese a representarse a sí mismo, dado que ni siquiera es presidente de su bloque en la Legislatura Provincial.
Nuevamente Alberto Fernández confunde el logrado apoyo político con licencia social. El llamado a aprobar la zonificación cuanto antes sumirá a Chubut nuevamente en movilizaciones masivas en medio de una pandemia de la que el gobierno provincial lejos de ocuparse, busca utilizar para imponer la rechazada megaminería. Si los gobernantes no comprenden la firme decisión del pueblo chubutense, impondrán un escenario de alto conflicto como lo fue la imposición del Pacto YPF-Chevron en Neuquén en 2013 y la modificación de la Ley 7722 en Mendoza a fines de 2019. A ello hay que sumar la pandemia y la crisis en la que sumergieron a Chubut desde hace ya tres años y se profundiza día a día. Lejos de poder esperar algo de representantes que ya dinamitaron todo su capital político, otra vez se vislumbra que sólo el pueblo salvará al pueblo.