Mauro Palma remarcó que pese a que les deben 2 meses de sueldos y no hay recursos, “la solidaridad y empatía nos llena de orgullo y ganas de devolver cuanto ante la energía”. Repasó que puede llegar a demandar entre 10 y 15 días restablecer en su totalidad el servicio, se busca hacer reparaciones provisorias y reveló que casi 60 kilómetros de la línea fueron destruidos.
En diálogo con Radio 3, el delegado de Luz y Fuerza en la región cordillerana, Mauro Palma, dio detalles de las tareas que realiza el personal de Servicios Públicos para intentar restablecer la energía eléctrica en la Comarca Andina luego de los incendios de esta semana.
Repasó que pese a la deuda salarial que mantiene el Estado provincial con ellos y la falta de recursos que denuncian hace tiempo “nos ponemos en el modo de obligación, como siempre lo hemos hecho”.
“Hay mucha solidaridad y empatía, eso nos llena de orgullo y ganas de devolver cuanto ante la energía a la gente”, remarcó.
En cuanto a los daños, precisó que entre 50 y 60 kilómetros de líneas fueron afectadas por el fuego, hay más de 500 postes destruidos y caídos, y entre 35 y 40 transformadores destruidos, a lo que se suman los cables que quedaron dañados.
“Fue como si una bomba hubiese caído. Nunca vivimos algo así, estos incendios uno ha vivido pero nunca con una destrucción de esta magnitud”, subrayó.
El trabajador subrayó que la reposición de los elementos necesarios para recomponer el sistema demandará tiempo y dinero. Precisó que por ejemplo los postes llegan del norte del país o de otras partes de la Provincia”.
“Es una fortuna el dinero y el tiempo que va a llevar restablecer los servicios”, añadiendo que por su experiencia y el análisis de la situación, “estimamos que en entre 10 o 15 días se podría devolver la normalidad en la zona”.
En cuanto a los trabajos realizados al momento, Palma repasó que “pudimos recuperar la línea de 33kv, que alimenta la subestación de Las Golondrinas que es el punto neurálgico eléctrico de la Comarca”.
Mientras se consiguen los nuevos elementos, Mauro Palma remarcó que “tratamos de recuperar paliativamente una línea secundaria de 13,2kv, que no tendrá el servicio ni la calidad de la línea de 33 que quedó destruida en Radal. Aunque sea para las bombas de agua y los hospitales”.
Actualmente, en el lugar trabajan casi 30 personas, casi 20 de la Comarca a quienes se les suman trabajadores enviados desde Rawson. El personal Administrativo incluso se ha sumado a las tareas de logística y elaboración de viandas para el personal en terreno.
Por último, reiteró que Servicios Públicos depende del Estado provincial y eso hace que “no podamos ser más expeditivos para hacer compras directas”, por lo que se estaban evaluando mecanismo para agilizar la adquisición de los elementos.