El Secretario General del Sindicato Petróleo y Gas Privado del Chubut, Jorge ‘Loma’ Ávila, mantiene duras reuniones en Capital Federal con autoridades de San Antonio Internacional para salvaguardar los puestos de trabajo de más de 1500 petroleros. “SAI no está en condiciones de decir cuando pagará el 30% faltante en los salarios, tampoco puede decir si va a poder pagar aguinaldos. Cuando empiezan a aparecer estas cosas lo único que se debe priorizar son las fuentes de trabajo”, sostuvo.
En este sentido, señaló que “tenemos un grave problema con lo que está pasando con San Antonio. La empresa no puede garantizar si va a poder pagar aguinaldos. Cuando empiezan a aparecer estas cosas lo único que se debe priorizar son las fuentes de trabajo”.
“Tenemos 650 trabajadores en Santa Cruz y 850 en Comodoro Rivadavia. Cerca de 1500 compañeros podrían perder su empleo si San Antonio no consigue salvaguardar su empresa”, dijo en diálogo con FM La Petrolera 89.3 MHz.
Asimismo, aclaró que “surgieron las peores novedades hoy en la reunión con los directivos de la empresa. Acá hay que encontrar cómo se sale de toda esta situación. Yo no estoy peleando que SAI siga, yo estoy peleando que me garanticen donde va a trabajar la gente”.
“Antes de la pandemia en Cerro Dragón teníamos 16 perforadores, hoy tenemos 6. Perdimos más de la mitad de los equipos. ¿Tenemos un problema? Claro que si porque nos sobra gente pero esta situación ya tocó fondo”, indicó.
En este marco, destacó que “SAI no está en condiciones de decir cuando pagará el 30% faltante en los salarios. Tiene una deuda enorme con la AFIP, con todo el mundo”.
“Yo no voy a dejar que ningún trabajador de San Antonio pierda la indemnización o la antigüedad porque se le dio el gusto y gana a la operadora”, destacó.
También aseveró: “Les guste o no les guste, los trabajadores son míos, entonces yo los tengo que cuidar, defender y proteger de la mejor manera posible”.
“No podemos pensar en estar quemando cubiertas para las Fiesta de Fin de Año, cuando tenemos un barril a 85 dólares”, concluyó finalmente Ávila.