La diputada nacional comodorense de Juntos por el Cambio, Ana Clara Romero, solicitó al Poder Ejecutivo Nacional que asigne una partida presupuestaria extraordinaria y conmemorativa en pos de lograr su reivindicación histórica.
Con motivo de cumplirse el 40° Aniversario de la Guerra de Malvinas y en reconocimiento del rol clave que cumplió el Hospital Regional de Comodoro Rivadavia durante el enfrentamiento bélico, la diputada nacional comodorense de Juntos por el Cambio, Ana Clara Romero, solicitó al Poder Ejecutivo Nacional que asigne una partida presupuestaria extraordinaria y conmemorativa en pos de lograr su reivindicación histórica. Romero es también autora del proyecto aprobado por el Congreso que declara al año 2022 como “Año Homenaje a los 40 años de la gesta de Malvinas, a sus veteranos y caídos”.
Además, junto con Matías Taccetta, diputado nacional chubutense del mismo espacio, presentaron un pedido de informes motivado por los reiterados reclamos por incumplimiento del Programa de Atención al Veterano que brinda el Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados (INSSJP).
“El objetivo de esta solicitud de aportes extraordinarios para el Hospital Regional es reconocer la enorme labor humanitaria que desempeñaron sus trabajadores durante la Guerra de Malvinas. Comodoro Rivadavia tuvo un rol trascendental durante el conflicto, por su ubicación geográfica e infraestructura; los comodorenses tenemos vívidos recuerdos de la guerra”, sostuvo Romero.
De acuerdo con los registros históricos, el nosocomio local recibió 495 heridos durante la duración del conflicto, el primero llegó el 3 de abril de 1982. Convertido en un hospital de guerra, recibía soldados provenientes de distintos lugares del país, quienes obtenían tratamientos para sus heridas, contención y acompañamiento. Médicos, enfermeras y asistentes realizaron una inmensa labor humanitaria; desbordado por la demanda de atención, el Hospital debió suspender los francos y licencias, muchos tuvieron que adaptarse a nuevas funciones, e incluso fueron realizadas reformas edilicias para poder atender a la mayor cantidad de heridos posible.
“Es necesario reconocer el rol protagónico de nuestro hospital y en este 40º aniversario, también reivindicar y homenajear a sus veteranos y caídos, por eso me pareció fundamental reforzar su recuerdo y valor durante todo el año, más allá de este 2 de abril tan sentido y solicité la declaración del año en su conmemoración. El compromiso con los veteranos debe ser de todo el año y todos los años, no puede saldarse con anuncios vacíos”, sostuvo Romero.
La salud de los veteranos y sus familias
El Programa Nacional de Atención al Veterano de Guerra el Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados (INSSJP) fue creado con la finalidad de satisfacer la demanda de atención médica y odontológica de los afiliados veteranos de guerra y su grupo familiar. Aunque corresponde al Estado Nacional garantizar el derecho constitucional a la salud de los ex-combatientes, de un tiempo a esta parte, se han evidenciado significativos reclamos por incumplimiento de los servicios de atención que realizan los afiliados veteranos. La diputada mencionó entre los reclamos, la desaparición de la cartilla de prestadores de muchas entidades, que por los costos que demandaban las prestaciones de los afiliados, solamente atendían a los afiliados al Programa de Atención Médica Integral (PAMI) pero no así a los afiliados veteranos y sus familias comprendidos en el Programa. También reclaman la ineficiente provisión de medicamentos y, en cuanto a las prestaciones odontológicas, luego de aproximadamente un año y medio sin atención, el INSSJP celebró un convenio con la Facultad de Odontología de la Universidad de Buenos Aires (UBA) para la atención de los afiliados veteranos que solo beneficia a quienes residen en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires o cercanías, pero no así a los afiliados que se encuentran en el resto del país.
“Es responsabilidad de quienes representamos al pueblo de la Nación Argentina, impulsar y garantizar políticas públicas que busquen no solo el reconocimiento de la labor brindada por estos ciudadanos sino que también compensar los padecimientos psíquicos y físicos propios de la guerra y de un conflicto bélico”, finalizó Romero.