Jugará allí desde las 16 frente a Croacia por las semifinales del Mundial. Será la cuarta presentación de la «albiceleste» en este escenario, que será la sede de la final.
Por las semifinales del Mundial, Argentina volverá este martes a jugar en el estadio Lusail, el más grande del Mundial de Qatar 2022 y el cual será la sede de la final.
Allí, la «albiceleste» jugará desde las 16 ante Croacia en un encuentro por las semifinales que será transmitido por Radio 3, a través de La Red.
Será la cuarta presentación del seleccionado conducido por Lionel Scaloni en ese estadio, tras la sorpresiva caída allí ante Arabia Saudita por 2-1 en el debut en el certamen, la posterior victoria ante México por 2 a 0, en el segundo encuentro del Grupo C, y la victoria ante Países Bajos por 4-3 en los penales y la cual selló el pase a las semifinales.
Ubicado a unos 15 kilómetros al norte de Doha en la «nueva» ciudad de Lusail, el estadio -con un aforo de 88 966 espectadores- fue elegido para ser el escenario de mayor actividad, con 10 partidos programados, entre ellos la final del 18 de diciembre.
Con buen acceso a través de la autopista y el metro de Doha, el estadio fue construido como eje central de Lusail, una ciudad que crecerá a partir de la llegada del Mundial.
La empresa británica de arquitectura Foster + Partners, la misma que realizó el nuevo Webley de Londres, diseñó el exterior con la forma de los cuencos, un tradicional objeto de la artesanía local.
Con la luz del día la fachada tiene un aspecto de un cuenco de oro bruñido y por la noche se ilumina con imponentes juegos de luces.
El techo tiene un diámetro de 307 metros y está hecho de una membrana de cable que tiene un patrón que recrea elementos en forma de diamante.
El primer presupuesto que se manejó cuando empezó la construcción en 2017 fue 767 millones de dólares y fue el último de los ocho en terminarse, indicó la agencia Télam.