Sigue la escalada inflacionaria. Pero no afecta solo al consumidor, sino que al propio carnicero que todas las semanas tiene subas entre 150 y 170 pesos. Lo positivo: se comercializa cada vez más la carne del Virch.
Según datos proporcionados por Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) y sistematizados por el equipo tecnico del Cluster Bovino del Virch y la Subsecretaria de Ganaderia, en el 2022 la cifra de cabezas de ganado vacuno trepó hasta los 110 mil ejemplares, 30 mil más que en 2018 y la perspectiva para este año marca un mayor desarrollo del sector.
Hay un boom cárnico en la zona, pero que no escapa a la realidad productiva nacional y el proceso inflacionario, encareciendo cada etapa, hasta llegar al mostrador de la carnicería. «Estoy trabajando muy buena, siempre fue excelente» la carne del valle, aseveró el carniro de Rawson, Miguel Ángel Cárdenas.
Según los datos relevados, los precios de la cárne en góndola subieron fuertemente desde diciembre a la fecha en el Valle Inferior del Río Chubut. Y las medidas aplicadas por el Gobierno nacional para contener los valores alcanza a las cadenas de supermercados y hoy provoca que haya un masivo consumo de lo que se ofrece y las heladeras exibidoras casi vacías.
Para entender la suba, dialogamos con el carnicero de Rawson, quien explicó que se dio una fuerte suba del precio «en pie» (La carne de bovino en pie se refiere al animal vivo para su venta, ya sea para engorda o para ser sacrificado.) y en gancho, que es lo que llega a la carnicería.
El carnicero explicó que en noviembre y diciembre «se estaba pagando 800 pesos el kilo en boleta y hoy sale $1.500″. Asegurando que después se transfiere al precio al público y tomó como parámetro que en esa misma fecha, un kilo de carne (promedio) estaba $1.800 y ahora cualquier negocio está en 3.200 o 3.300».
En su caso, dijo que trabaja solo con carne que se produce en el Valle Inferior del Río Chubut y proveedor mantuvo los precios en las últimas dos semanas, lo que «permite tener una estabilidad» y en su caso el precio más caro es de $2.890, que serían cortes como el lomo y el bife de chorizo.
Los cortes más económicos siguen siendo la aguja, tortuguita, chingolo y la paleta. Están en un promedio de $1.990 (depende cada carnicería).
Caída de las ventas
No solo pasa con las carnicerías, la baja es sensible en distintos rubros y se debe a que en la economía familiar se concentran en el comienzo de la etapa escolar. Es por ello que las ventas se redujeron en las últimas dos semanas, pero también hay un efecto precio, generando que se compre menos carne por día para el consumo.
«El que compraba 1 kilo o 1,5 kilos trata de consumir 800 gramos por día».
Según el carnicero rawsense, esto «seguirá subiendo. No hay opción para bajar», señalando que «tendria que haber estabilidad de precios por seis meses y que genere tranguilidad».
Sube todas las semanas
Desde finales del año 2022 hasta la fecha, el precio de la carne fue variando, alcanzando un 80% de variación. «La carne se mueve todas las semanas unos 150 a 170 pesos». Y el carnicero asegura que le explica a la gente que lo que se ve en las góndolas de los supermercados es el acuerdo del Gobierno con las grandes cadenas, pero que no reflejan estabilidad, es temporario y con esos sectores de la economía de consumo.
«Es imposible que el carnicero baje los precios. Yo tengo precios buenos, pero si los bajo más no se a qué precio me va a venir a mi».