Doce años después del asesinato de Rodrigo Colihuinca en Trelew, dio un giro la investigación dado un nuevo impulso al caso.
Un hombre se presentó en una comisaría afirmando ser el autor del crimen y brindando detalles escalofriantes sobre el hecho.
“El día martes se presentó solo en la Comisaria diciendo que lo detengan, que había cometido un crimen, que ya no soportaba ese remordimiento”, relató el fiscal a cargo de la causa, Fabián Moyano, en diálogo con el programa “Activemos” por FM del Viento. “Mencionó quién era la víctima, menciona a Rodrigo Colihuinca, ‘lo degollé con un cuchillo y tiré la cabeza por arriba de un cerco’”.
La confesión del hombre, que vive a dos cuadras del lugar del crimen, coincidía con detalles específicos de la investigación. “Teníamos bajo sospecha al hermano mayor de la persona que se entregó, que también le habíamos sacado ADN en su momento para cotejar”, agregó Moyano. “Teníamos registros del año 2020 que el hermano citaba a otras personas en el lugar donde lo matan a Rodrigo para tener encuentros, había indicios de que hayan podido pactar algún tipo de encuentro en este lugar”.
“Hubo un testigo que informó que lo habían citado un mes antes del crimen en ese lugar”, señaló el fiscal .”A raíz de esas comunicaciones veníamos investigando a esta persona, habíamos sacado ADN pero no encontrábamos relación con preservativos y cabellos que habían en el lugar”.
El día que se entregó estaba exaltado
“El mismo día que yo pedí la detención se le sacó sangre que se va a cotejar”, indicó. “La policía dice que estaba exaltado, ellos no pueden determinar si está bajo los efectos de una sustancia. Hablaba y explicaba ciertos detalles sobre el hecho y los policías hicieron muy bien en avisar a MPF”
“En su momento hubo detalles, cortes y posición final que yo nunca di, conocer todo eso es un tema que me llamó la atención”, expresó, y agregó “él dijo ‘yo no actúe solo’ y a Rodrigo le roban un teléfono celular que a los 4 años apareció en la casa de otra persona”. “Cuando allanamos la casa había 13 teléfonos celulares, así que sospecho con total fundamento de que son robados”.
“El llega y colocó las dos manos en el mostrador y dijo ‘métanme preso porque maté a alguien’ y comenzó a hablar”, relató Moyano. “Cuando comenzó a dar detalles le dijeron ‘cállate porque puede ser utilizado en tu contra’”.