El dato corresponde a marzo y se ubica como el mes con mayor nivel de actividad en la historia de la formación. Con más de 360.000 barriles diarios el crudo no convencional ya representa más del 51% de la producción total del país.
Frente a un declino visible de la producción en los yacimientos convencionales, la producción hidrocarburífera argentina sigue mostrando una tendencia expansiva en este primer trimestre de 2024, traccionada por el crecimiento del shale neuquino.
Un informe de la consultora Economía & Energía (E&E), que dirige Nicolás Arceo, señaló que durante marzo se registraron 30 nuevos pozos de shale oil, ubicándose como el mes con mayor nivel de actividad en la historia de la formación Vaca Muerta.
«Durante el primer trimestre de 2024 la producción de petróleo no convencional alcanzó un incremento interanual del 21%, registrando un crecimiento más moderado que lo verificado en los años previos», detalló el documento.
Las áreas que registraron mayo crecimiento fueron Bandurria Sur, Loma Campana, Coirón Amargo Sur Oeste, Bajada del Palo y La Amarga Chica.
Por su parte, en términos porcentuales, los mayores incrementos se observaron en Coirón Amargo Sur Oeste, Mata Mora Norte y Bandurria Sur. En tanto, Bajo del Choique – La Invernada y La Calera son las 2 únicas áreas que verificaron una caída en su producción.
En los datos expuestos por E&E puede verificarse que durante los primeros 3 meses de 2024, la producción convencional de petróleo en la cuenca Neuquina se redujo un 7% con relación al mismo período del año previo, mientras que el declino de la producción en el Golfo San Jorge fue del 2%.
El crecimiento de la producción de shale gas entre el primer trimestre de 2023 y el mismo período de 2024 estuvo liderado por El Mangrullo, Aguada Pichana Este, Aguada Pichana Oeste y Sierra Chata, que explicaron el 30%, 26%, 20% y 19% del incremento total de la producción, respectivamente.
Sobre las inversiones infraestructura, la consultora que dirige Arceo sugiere que «si bien la ampliación realizada por Oldelval y la reactivación del Oleoducto Trasandino (OTASA) permitieron salvar transitoriamente las restricciones de transporte y alcanzar un crecimiento significativo en la producción, la capacidad de evacuación de crudo desde la Cuenca Neuquina se encuentra nuevamente saturada».
Las obras de ampliación de transporte en curso permitirán incrementar la capacidad de evacuación a partir del cuarto trimestre del presente año y alcanzar un salto sustantivo con la culminación del proyecto de duplicar de Oldelval a mediados del próximo año.