En la apertura del año judicial del Tribunal de la Rota Romana, el Papa Francisco exhortó a los obispos y jueces eclesiásticos a agilizar los procesos de nulidad matrimonial, recordando que su reforma de 2015 buscó hacer más accesible este procedimiento a los fieles.
El pontífice subrayó que la verificación de la validez de un matrimonio representa para muchos una “posibilidad importante” y que la Iglesia debe facilitar este camino para quienes buscan una solución a su situación personal. “Nos interpela el dolor y la esperanza de muchos fieles que buscan claridad sobre la verdad de su condición”, afirmó Francisco. Relata R3cp
Con las reformas introducidas en los Motu Proprio Mitis Iudex Dominus Iesus y Mitis et Misericors Iesus, el Vaticano permitió que los obispos diocesanos pudieran actuar como jueces en casos de nulidad evidente, además de eliminar la exigencia de una doble sentencia y promover la gratuidad de los procedimientos.
El Papa destacó la importancia del processus brevior, un mecanismo que permite una resolución más rápida en casos claros de nulidad. Sin embargo, lamentó que muchos fieles desconocen esta opción y exhortó a la Iglesia a difundir mejor esta alternativa.
“A estas personapapas hay que ayudarlas a recorrer este camino lo más fácilmente posible”, enfatizó el pontífice, insistiendo en que los tribunales diocesanos deben equilibrar el rigor jurídico con la sensibilidad pastoral. Además, hizo un llamado a garantizar que los jueces eclesiásticos cuenten con una formación sólida, tanto intelectual como espiritual, para tratar cada caso con justicia y diligencia.
Por último, Francisco recordó que la misión de los jueces de la Iglesia no es meramente jurídica, sino también pastoral, y que su labor tiene el propósito de “purificar y restablecer las relaciones interpersonales” dentro de la comunidad eclesial.