Embajador Nicholas Burns. La normativa había sido implementada en enero por Nicholas Burns, el embajador nombrado por Joe Biden, días antes de dejar su cargo.
El veto se aplica al personal de las delegaciones diplomáticas de Estados Unidos en China continental, incluyendo la embajada en Pekín y los consulados en Guangzhou, Shanghái, Shenyang y Wuhan, así como al consulado estadounidense en el territorio semiautónomo de Hong Kong.
Según el informe de AP, «no se conocía una política general de ‘no confraternización’ como esta desde la Guerra Fría».
La normativa contempla una excepción para los trabajadores gubernamentales estadounidenses con relaciones preexistentes con ciudadanos chinos. No obstante, si esta exención es denegada, deberán terminar su relación personal o renunciar a su puesto de trabajo. Quienes incumplan la normativa recibirán la orden de abandonar China de inmediato.