El Gobierno nacional dispuso un nuevo incremento en los precios del bioetanol y el biodiésel, insumos clave para el corte de la nafta y el gasoil.
La medida, oficializada por la Secretaría de Energía, busca evitar “distorsiones” en el mercado y compensar los costos de producción, aunque podría repercutir directamente en el bolsillo de los usuarios. Según Radio Mitre, el ajuste se enmarca en un contexto de suba de impuestos a los combustibles aplicada a comienzos de agosto, lo que presiona aún más el valor final en surtidores.
Suba oficializada en el Boletín Oficial
Las resoluciones 341 y 342 de la Secretaría de Energía, firmadas por su titular María Carmen Tettamanti, establecen un aumento en el bioetanol elaborado a base de caña de azúcar, que pasa a $824,044 por litro. El bioetanol derivado de maíz sube un 3%, alcanzando $755,258 por litro.
En el caso del biodiésel, el incremento fue del 4%, fijando el valor de la tonelada en $1.354.507. Estas medidas, según el organismo, buscan corregir desfasajes en la implementación de precios y cubrir los costos reales de producción.
Posible traslado a los precios de nafta y gasoil
El Gobierno justificó el aumento como una forma de evitar “distorsiones” en relación con el combustible fósil que se vende en las estaciones de servicio. Sin embargo, especialistas advierten que el ajuste podría trasladarse de forma parcial o total al valor que pagan los automovilistas.
La suba se suma al reciente incremento impositivo aplicado a comienzos de mes, lo que configura un escenario de presión inflacionaria en el sector energético.
Contexto de consumo en baja
Datos oficiales muestran que la venta de combustibles al público en Argentina cayó un 4,6% en junio respecto a mayo. En comparación interanual, se observó una leve mejora del 3,3%, atribuida al piso de ventas registrado a mediados del año pasado.
Para el Gobierno, este incremento en los biocombustibles es parte de un ajuste necesario para sostener la cadena de producción y mantener la competitividad del sector.