Deportivo Madryn recibirá este domingo a Arsenal de Sarandí en el estadio Abel Sastre, en un encuentro que podría marcar un antes y un después en su historia.
El partido, correspondiente a la penúltima fecha de la Zona A de la Primera Nacional, se disputará desde las 15:30 con arbitraje de Nahuel Viñas. La ciudad ya vive con ansiedad y esperanza un duelo que podría dejar al Aurinegro en la final por el ascenso. De acuerdo con LU17.
El equipo dirigido por Leandro Gracián llega como líder con 57 puntos y sabe que una victoria lo deposita directamente en la definición. Con dos puntos de ventaja sobre Atlanta, un empate también le sirve en la práctica, gracias a la favorable diferencia de gol. Madryn tiene todo a su favor, pero no puede relajarse ante un rival urgido.
Arsenal llega a Chubut con una misión completamente distinta, aunque no menos intensa: evitar el descenso. El conjunto de Sarandí necesita los tres puntos para seguir con vida, lo que lo convierte en un adversario de cuidado. Ambos equipos se juegan el futuro en 90 minutos intensos.
El Aurinegro no podrá contar con dos piezas clave: Agustín Sosa y Germán Rivero, ambos expulsados en la última fecha ante All Boys. En su lugar, ingresarían Santiago Postel en la defensa, y entre Ayala o Mana se definirá el acompañante de Silba en el ataque. Gracián mantiene el misterio, pero confía en la fortaleza del grupo.
Madryn atraviesa un momento excepcional en condición de local, con siete victorias consecutivas en el Abel Sastre. La hinchada promete colmar el estadio una vez más, con un clima que se anticipa fervoroso y lleno de ilusión. Desde temprano, se esperan caravanas, bombos y una ciudad movilizada por el sueño del ascenso.
El plantel también lo siente, y trabaja en silencio, sabiendo que está a un paso de algo grande. La concentración es total, pero el entusiasmo se nota en cada rincón de Puerto Madryn.
En simultáneo, la Zona B también vive momentos decisivos, con Gimnasia de Mendoza en posición expectante. El Lobo mendocino puede sellar su pase si vence a Chacarita y se combinan ciertos resultados. El formato del torneo hace que cada detalle cuente y las emociones se repartan por todo el país.
La situación para Deportivo Madryn es clara: si no pierde, mantendrá el primer lugar y dependerá exclusivamente de sí mismo en la última fecha. Esa ventaja le da margen, pero nadie quiere especular. El objetivo es ganar y dejar todo cerrado cuanto antes.
Con el sueño de llegar a la Liga Profesional más presente que nunca, Madryn se prepara para un domingo histórico. Los jugadores lo saben, el cuerpo técnico también, y los hinchas lo sienten en el aire. Solo queda esperar que la pelota ruede y que la pasión haga el resto.