El presidente colombiano, Gustavo Petro, acusa a Estados Unidos de atacar una fábrica de cocaína en Venezuela, vinculándola con la guerrilla del ELN. Maduro guarda silencio.
En una escalada de la retórica sobre la ofensiva antidroga estadounidense en América Latina, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, hizo un explosivo anuncio este martes 30 de diciembre. A través de su cuenta en X (antes Twitter), Petro afirmó que Estados Unidos, bajo el gobierno de Donald Trump, bombardeó una instalación de producción de cocaína en la ciudad venezolana de Maracaibo. Según DW.
La acusación de Petro y el vínculo con el ELN
El silencio de Maduro y el contexto de la ofensiva estadounidense
Hasta el momento, el gobierno del presidente venezolano, Nicolás Maduro, no se ha pronunciado sobre el supuesto bombardeo ni sobre las declaraciones de Petro. Este silencio contrasta con la habitual retórica antiimperialista de Caracas.
El ataque terrestre anunciado por Trump marcaría un punto de inflexión en la campaña militar que Washington inició en septiembre. Hasta ahora, esta ofensiva se había centrado en bombardeos a embarcaciones sospechosas en el Caribe y el Pacífico, operaciones que según informes han dejado más de un centenar de muertos. Trump lleva semanas advirtiendo que los ataques se extenderían «pronto» a objetivos en tierra firme contra los cárteles de droga en la región.




