El presidente venezolano, Nicolás Maduro, lanzó una nueva operación de defensa nacional ante el despliegue militar de Estados Unidos en el Caribe, lo que reaviva la tensión bilateral.
Durante un acto transmitido por el canal estatal Venezolana de Televisión (VTV), Maduro informó la puesta en marcha del “Plan Independencia 200”, una operación que incluye 284 frentes de batalla en todo el territorio venezolano. El objetivo, dijo, es garantizar la soberanía y la paz frente a lo que considera una amenaza estadounidense.
“Estamos activando desde el Caribe, la frontera con Colombia, los Andes, el oriente y el sur del país. Toda la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, la Milicia y los Cuerpos Combatientes están listos para defender nuestra tierra”, expresó el mandatario.
Un llamado a la resistencia permanente
Maduro afirmó que esta estrategia se inscribe dentro del concepto de “resistencia activa del pueblo” y de una “ofensiva permanente” contra el imperialismo. Rodeado de altos mandos militares y autoridades civiles, advirtió:
“Si tenemos que volver a combatir, lo haremos por la libertad de nuestra patria grande”.
El líder chavista también exigió proteger “todas las costas de punta a punta” y sostuvo que los recursos del país le pertenecen únicamente al pueblo venezolano.
La respuesta al despliegue de Estados Unidos
El anuncio se produce después de que el gobierno de Donald Trump movilizara buques de guerra, submarinos nucleares y aviones de combate F-35 hacia el Caribe, en lo que justificó como una operación contra el narcotráfico.
Según Clarín , la tensión escaló tras un enfrentamiento en el que fuerzas estadounidenses destruyeron una lancha venezolana, causando la muerte de once personas a las que Trump calificó como “narcoterroristas”.
Además, Washington acusa a Maduro de liderar el llamado “Cartel de los Soles”, presuntamente vinculado al narcotráfico, y mantiene una recompensa de 50 millones de dólares por información que conduzca a su captura.
Entre la confrontación y el llamado al diálogo
Si bien el discurso de Maduro endureció el tono, en los últimos días también ha hecho llamados al diálogo para evitar una escalada mayor. Sin embargo, reiteró que Venezuela está preparada para responder militarmente si fuese necesario.