Venezuela realizó este sábado un masivo despliegue militar en calles y costas del país bajo la consigna «Los Cuarteles van al Pueblo», en respuesta directa al reforzamiento de la presencia naval estadounidense en el Caribe.
La movilización incluyó columnas blindadas en Caracas y ejercicios conjuntos con civiles en regiones costeras.
Operativo cívico-militar en todo el territorio
El ejercicio involucró a 5.336 circuitos comunales y comunas que recibieron a soldados del «Ejército Libertador», según explicó el ministro de Comunas, Ángel Prado. La operación combinó despliegue de tropas y equipamiento bélico con actividades conjuntas entre pescadores y militares en zonas costeras, buscando mostrar cohesión interna frente a lo que Caracas considera «amenazas patoteras» externas.
Respuesta a presencia militar estadounidense en Caribe
El trasfondo de la movilización es la decisión de Estados Unidos de reforzar su presencia naval y aérea en la región. Venezuela interpreta esta acción como un intento de presión política y respondió exhibiendo capacidad militar con participación social. Medios internacionales destacaron la escala inusual del operativo, con miles de efectivos desplegados simultáneamente.
Críticas de la oposición y mensaje político
La oposición venezolana acusó al gobierno de utilizar el operativo como propaganda interna en un año de grave crisis económica. Sin embargo, para el oficialismo, la movilización tuvo un doble propósito: reafirmar el control interno y mostrar que la confrontación con Washington también se libra en el terreno simbólico. Esta no es la primera vez que Caracas responde con maniobras visibles a la presencia militar estadounidense.
El masivo despliegue militar venezolano refleja la escalada de tensiones en la región y la determinación del gobierno de Maduro de proyectar fortaleza tanto hacia el exterior como hacia su base política interna, en un contexto de creciente presión internacional. Información extraída del medio La17.