El sospechoso fue expulsado de Bolivia y trasladado a una cárcel de máxima seguridad en Jujuy. Está acusado de haber manejado la camioneta utilizada en el traslado de las víctimas.
En medio de un fuerte operativo, Lázaro Víctor Sotacuro (41), señalado como el quinto implicado en el triple crimen de Florencio Varela, fue detenido tras ser expulsado de Bolivia. Según TN, la Justicia lo acusa de haber conducido la camioneta en la que viajaban Brenda del Castillo (20), Morena Verdi (20) y Lara Gutiérrez (15), halladas enterradas en una vivienda de la localidad bonaerense.
Los investigadores sostienen que Sotacuro integraba la banda narco liderada por Victoriano Tony Janzen Valverde, alias “Pequeño J”, y que actuó como apoyo en el plan que derivó en los asesinatos.
Cómo fue capturado el sospechoso
El operativo comenzó luego de que la policía jujeña recibiera dos pedidos de captura el viernes. Tras el análisis de cámaras de seguridad y registros de pasajeros, se confirmó que Sotacuro había viajado en un micro desde Buenos Aires hasta Jujuy.
La búsqueda continuó en coordinación con la Policía Nacional de Bolivia, que logró ubicarlo en un hotel de Villazón. Finalmente, fue expulsado del vecino país en la madrugada del sábado y entregado a las autoridades argentinas.
El traslado bajo estricta custodia
Una vez en territorio nacional, el imputado fue revisado en el Hospital Jorge Uro y alojado de manera preventiva en una comisaría local. A las 15:53, fue trasladado a la cárcel de máxima seguridad de Jujuy, donde quedó a disposición de la Justicia.
Otros detenidos y prófugos
Por el caso también están detenidos Miguel Ángel Villanueva Silva (25), Daniela Iara Ibarra (19), Maximiliano Andrés Parra (18) y Magalí Celeste González Guerrero (28).
Mientras tanto, se mantienen activas las órdenes de captura nacional contra “Pequeño J”, considerado el autor intelectual del crimen, y su presunto colaborador, Matías Agustín Ozorio (28).
Una investigación en marcha
La fiscalía avanza en la reconstrucción del hecho, donde se combinan pruebas de cámaras de seguridad, testimonios y peritajes. El caso expuso la violencia narco y la complejidad de las redes criminales que operan en el conurbano bonaerense.