El Gobierno argentino firmará un acuerdo con el FBI de Estados Unidos para reforzar la cooperación en inteligencia y prevención de ataques terroristas.
El convenio, que funcionará como un “teléfono rojo” entre ambos países, busca mejorar la respuesta ante posibles amenazas y fortalecer el recientemente creado Centro Nacional Antiterrorismo (CNA).
Un nuevo canal directo de comunicación con EE.UU.
El acuerdo será rubricado este jueves en Washington, donde una delegación argentina encabezada por la secretaria de Seguridad, Alejandra Monteoliva, y el titular de la SIDE, Sergio Neiffert, mantendrá reuniones con las autoridades del FBI.
Según explicó la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, durante su participación en el 61° Coloquio de IDEA, el convenio permitirá crear una línea directa entre ambos países para compartir información en tiempo real ante posibles alertas.
“El objetivo es actuar de forma inmediata ante cualquier advertencia o indicio de ataque. Queremos estar conectados en tiempo real con los organismos internacionales de seguridad”, afirmó Bullrich.
De acuerdo con información publicada por Radio3, esta cooperación incluirá el intercambio de inteligencia, capacitaciones y el diseño de protocolos conjuntos de actuación frente a situaciones de riesgo.
El rol del Centro Nacional Antiterrorismo
El Centro Nacional Antiterrorismo (CNA), creado recientemente, será el eje operativo de este sistema de coordinación. El organismo buscará integrar fuerzas de seguridad, servicios de inteligencia y agencias internacionales en una red de respuesta rápida ante potenciales amenazas terroristas.
Bullrich destacó que el CNA trabajará de manera articulada con los países aliados y organismos multilaterales, como la Unión Europea, con el fin de fortalecer la capacidad de detección y reacción del Estado argentino frente a los desafíos de la seguridad global.
Hacia una cooperación internacional más amplia
Tras la firma con el FBI, el Gobierno argentino prevé avanzar en acuerdos de colaboración similares con la Unión Europea y otras naciones latinoamericanas.
La intención oficial es posicionar a la Argentina dentro de una red global de seguridad, capaz de intercambiar información estratégica y anticipar posibles focos de riesgo.
La ministra subrayó que la prioridad es prevenir ataques y proteger a la población mediante una cooperación fluida con los principales actores internacionales del ámbito antiterrorista.
Un paso clave en la política de seguridad nacional
Con la implementación de este “teléfono rojo”, Argentina busca dar un salto cualitativo en materia de inteligencia y respuesta frente al terrorismo, consolidando su integración en los sistemas internacionales de prevención y alerta temprana.
La iniciativa se inscribe en una política de seguridad que prioriza la cooperación global y el fortalecimiento institucional para enfrentar las nuevas amenazas del siglo XXI.