Bohe aclaró que las renuncias en el gabinete son una medida rutinaria
Según El Comodorense el secretario de Gobierno de Comodoro Rivadavia, Sergio Bohe, explicó que el pedido de renuncias a los funcionarios municipales no responde a una crisis política tras las elecciones, sino a una metodología de gestión. Además, anticipó un 2026 con fuertes desafíos económicos y se refirió a las licitaciones de transporte y recolección de residuos.
Una práctica de gestión y no una crisis política
Bohe señaló que la solicitud de renuncias es una costumbre establecida desde el inicio de la actual administración. “Cada funcionario firmó su renuncia el primer día de gestión, sin fecha, como una forma de revisión y evaluación al cierre del año”, explicó el funcionario en diálogo con FM La Petrolera.
Según precisó, este mecanismo busca generar una instancia de autocrítica y análisis de los resultados obtenidos, previo a la presentación del presupuesto 2026. “Se trata de pasar en limpio lo actuado y definir con qué áreas continuaremos y cuáles deberán reorientar objetivos”, indicó.
Anticipan un 2026 con tensiones económicas
En sus declaraciones, Bohe advirtió que el próximo año “será muy difícil en materia económica”, tanto a nivel nacional como regional. “El gobierno nacional ya anunció reformas laborales, previsionales e impositivas. No son buenas noticias para los sectores populares, y menos aún para la Patagonia”, remarcó.
El secretario también destacó la importancia de la representación local en el Congreso: “Por primera vez, casi todos los legisladores nacionales de la región tienen domicilio en Comodoro o Rada Tilly. Es una oportunidad para llevar una agenda patagónica al nivel nacional”.
Licitaciones claves en marcha
Respecto a los servicios públicos, Bohe informó que las licitaciones del transporte urbano y de la recolección de residuos avanzan en la etapa de evaluación técnica y económica.
“Las comisiones están analizando las propuestas. Queremos que el proceso sea transparente, correcto y rápido”, afirmó.
El funcionario subrayó que estos contratos serán fundamentales para garantizar la calidad del servicio en los próximos años y asegurar la sostenibilidad económica del sistema municipal.
El balance de fin de año del gabinete comodorense se presenta como una etapa de revisión más que de crisis. Con un 2026 desafiante por delante, el municipio busca ordenar sus prioridades y sostener una gestión eficiente en un contexto económico complejo.




