El gigante financiero Morgan Stanley analizó el impacto de la contundente victoria del oficialismo en las elecciones legislativas y proyectó un escenario muy favorable para el sector bancario local.
Según el informe de la firma, la reafirmación de políticas favorables al mercado impulsará una fuerte expansión del crédito, que había sufrido por las elevadas tasas de interés en los últimos meses.
Un entorno constructivo para la banca
De acuerdo con el análisis de Morgan Stanley, los comicios consolidaron el apoyo para la normalización económica y la adopción de políticas favorables al mercado. Con estabilidad a la vista, las entidades bancarias argentinas deberían beneficiarse de una expansión crediticia plurianual, baja penetración financiera, sólido capital y renovado interés de los inversores. «Un entorno económico más constructivo podría convertir a Argentina en el mercado bancario de más rápido crecimiento de la región», afirmó la entidad.
Cifras que respaldan el optimismo
El informe presenta cifras realmente contundentes que revelan el potencial de crecimiento: en Argentina, los préstamos representan apenas el 13% del PBI, lo que constituye el nivel más bajo entre las principales economías de Latinoamérica. Sin embargo, este escenario está cambiando de manera acelerada; con el nuevo rumbo económico, la expansión de los préstamos ya avanza a un ritmo rápido. De hecho, los bancos analizados registraron un aumento real del crédito que oscila entre el 70% y el 100% en los últimos doce meses, y según las proyecciones, se espera que este dinamismo se mantenga. A este panorama alentador se suma que el sistema financiero local cuenta con un ratio BIS cercano al 27%, el más alto de toda América Latina, lo que refuerza su solidez.
Ventajas estructurales del mercado argentino
Morgan Stanley destacó un factor clave para el crecimiento crediticio: Argentina posee una proporción significativa de población de clase media, educada y con altos ingresos. En primer lugar, el informe subraya que el PBI per cápita del país supera ampliamente el promedio latinoamericano, ubicándose en una posición destacada, solo por detrás de Chile. En este contexto, el reporte es muy claro al hacer una comparación regional: «La proporción de consumidores de ingresos medios y altos es significativamente mayor: aproximadamente el 61% de la población, frente al 46% en Brasil y alrededor del 30% en México, Perú y Colombia». En consecuencia, y como resultado directo de este panorama socioeconómico, esta característica no solo facilita sino que también acelera de manera notable el proceso de bancarización en el país.
Riesgos y proyecciones a futuro
Aunque el panorama es optimista, la firma identifica posibles obstáculos. Una disminución del apoyo al plan de estabilización del Gobierno podría generar incertidumbre política, mayor inflación y menor apetito inversor. Asimismo, una caída de los precios de las materias primas o malas cosechas pondrían en juego los principales pilares del programa. Pese a estos riesgos, Morgan Stanley espera un ajuste ordenado, con un dólar oficial en torno a 1.700 pesos, y proyecta que Argentina recuperaría el acceso al mercado hacia junio de 2026. Información extraída del medio Infobae.




