Caputo negó haber negociado un rescate de USD 20.000 millones con bancos de EE.UU.
El ministro de Economía, Luis Caputo, desmintió este viernes que el Gobierno argentino haya negociado un rescate financiero por USD 20.000 millones con bancos estadounidenses, luego de que The Wall Street Journal informara que entidades privadas habrían desistido de otorgar ese préstamo. Caputo calificó la versión como una “operación” destinada a generar confusión y aseguró que la única negociación vigente es por una línea de crédito de menor magnitud.
Según informó C5N, la aclaración del funcionario se produjo tras la publicación del reconocido medio estadounidense que señalaba que JPMorgan Chase, Bank of America y Citigroup ya no evaluaban otorgar financiamiento de gran escala al país.
Caputo rechazó la versión y habló de “operación mediática”
Caputo respondió directamente en su cuenta de X a un posteo en el que se señalaba que el rescate millonario había quedado en pie únicamente por USD 5.000 millones. Allí, el ministro aseguró que la información era falsa:
“Nunca hablamos con los bancos de un rescate, ni de 20 mil millones. Es una operación más con la sola intención de generar confusión”, escribió, desmintiendo categóricamente la nota.
La declaración buscó cortar de raíz la versión publicada por The Wall Street Journal, que había atribuido el freno del supuesto rescate a la falta de definiciones del Tesoro de Estados Unidos sobre garantías y colaterales aceptables para evitar pérdidas.
Los bancos analizan otra vía: un repo de USD 5.000 millones
De acuerdo con la información difundida por medios internacionales y citada por C5N, las entidades financieras estadounidenses habrían descartado la posibilidad de un rescate convencional y dirigido su atención a un mecanismo más acotado: un préstamo estructurado bajo la modalidad de recompra, conocido como “repo”.
En este esquema, Argentina entregaría una cartera de inversiones como garantía para obtener divisas frescas de corto plazo. El principal objetivo sería cubrir una serie de vencimientos inmediatos que enfrenta el Gobierno, entre ellos una cancelación de deuda estimada en unos USD 4.000 millones a ejecutarse en enero.
Aunque Caputo negó por completo la existencia de un rescate negociado por USD 20.000 millones, la presión financiera sigue vigente y las alternativas se reducen a mecanismos transitorios que permitan al Ejecutivo afrontar los compromisos más urgentes.




