La Cámara baja se prepara para una nueva reconfiguración del mapa político
El interbloque Provincias Unidas acelera negociaciones para ampliar su representación y ganar influencia en los próximos debates legislativos.
Avances en la conformación del interbloque
Impulsado por los gobernadores Maximiliano Pullaro (Santa Fe) y Martín Llaryora (Córdoba), el espacio trabaja para sumar a Miguel Pichetto, Nicolás Massot y representantes de la Coalición Cívica.
“La negociación está encaminada”, aseguró una diputada que participa del armado, según información extraída de LA17
La conducción quedaría en manos de la santafesina Gisela Scaglia, decisión que generó tensiones internas luego de que Pichetto se enterara por los medios de su designación como jefa parlamentaria.
Pullaro tiene previsto viajar a Buenos Aires en las próximas horas para sellar el pacto definitivo antes de la sesión preparatoria.
Nuevos nombres y expectativa de crecimiento
En los últimos días se incorporaron José Nuñez, ex PRO, y Jorge Capozzi, quien también provenía de un armado cercano a Patricia Bullrich. Desde Encuentro Federal explicaron que la estrategia apunta a no quedar fuera del reparto de comisiones y poder negociar con mayor peso.
La mesa negociadora trabaja contra reloj: espera definir antes del jueves la “letra chica” del acuerdo.
El interbloque podría alcanzar 20 integrantes: seis cordobeses, cuatro santafesinos, cinco radicales, Pichetto, Massot, Ferraro y Frade. También mantienen diálogo con el santacruceño José Luis Garrido, lo que elevaría la nómina a 21 representantes.
Un actor clave en el próximo Congreso
Con esta nueva arquitectura, Provincias Unidas busca instalarse como un equilibrio de poder frente al oficialismo y otros bloques federales, posicionándose como un jugador determinante en cada votación importante.
Las definiciones finales llegarán en la previa del juramento de los nuevos diputados, en una etapa que promete mover el tablero parlamentario argentino.




