Equipo de C5N deportado de Venezuela: relatan los momentos de mayor tensión.
El periodista Adrián Salonia brindó nuevos detalles sobre la situación que vivió junto a Nicolás Munafó y Sebastián Solís al serles negado el ingreso a Venezuela. El episodio, que ocurrió en el aeropuerto de Caracas, fue descrito como un caso de “censura peligrosa” y “trato intimidante”. Según C5N —y de acuerdo con información extraída de C5N— los reporteros fueron retenidos, interrogados y finalmente deportados sin poder recuperar de inmediato sus pasaportes ni su equipaje.
Ingresaron a Venezuela, pero fueron retenidos de inmediato
Adrián Salonia explicó que la llegada del equipo ocurrió a las 2:00 de la madrugada del miércoles, con una escala previa en Bolivia. Apenas descendieron del avión, notaron un ambiente cargado de tensión, incluido un cartel con la foto del dirigente opositor Edmundo González Urrutia bajo la leyenda “se busca”.
Los venezolanos fueron separados de los extranjeros y, al percatarse de la presencia de cámaras, funcionarios de Migraciones iniciaron una serie de preguntas insistentes: “¿A qué vienen? ¿Cuánto tiempo se quedarán? ¿Quién los invitó?”. Según relató Salonia, la insistencia giraba en torno a que aparentemente debían tener una invitación oficial para ingresar al país.
Interrogatorios repetidos y aparición de personal sin identificación
Salonia detalló que distintos funcionarios repitieron los interrogatorios, tomaron fotografías de sus pasaportes y pidieron datos del hotel, del chofer asignado y de su itinerario. Luego intervino un hombre vestido de negro, presuntamente vinculado a inteligencia, quien exigió que identificaran a algún funcionario del Gobierno venezolano que “los hubiera autorizado”.
Pese a justificar que viajaban para mostrar la situación en Caracas, el personal migratorio no aceptó la respuesta y continuó con los cuestionamientos. Finalmente, sin brindar explicaciones claras, el equipo fue llevado por pasillos internos, fotografiado nuevamente y escoltado directamente hacia la manga de un avión.
Deportación inmediata y pérdida de equipaje
Los periodistas fueron obligados a abandonar Venezuela en el primer vuelo disponible, en condición de inadmisión. Sus pasaportes quedaron en poder de la aerolínea y fueron devueltos recién al aterrizar en Buenos Aires.
El camarógrafo Sebastián Solís y Nicolás Munafó no pudieron recuperar sus valijas, ya que habían sido despachadas. “Nos sacaron fotos y nos trataron como delincuentes”, describió Munafó al recordar el operativo que los expulsó del país.
Llamadas de disculpa y explicaciones de la Cancillería venezolana
En declaraciones para Argenzuela, Munafó aseguró que autoridades de Venezuela se comunicaron posteriormente para pedir disculpas y ofrecer asistencia en la recuperación del equipo de trabajo.
No obstante, remarcó que la experiencia fue de extremo maltrato: fotografiaron conversaciones de su teléfono y revisaron su interacción con un periodista venezolano. “Nos agarraron como chivo expiatorio”, afirmó.
El canal confirmó además que las autoridades venezolanas habían sido notificadas previamente del viaje de los tres periodistas y que, en principio, no existía impedimento para su ingreso.




