En declaraciones radiales, el exfuncionario realizó una fuerte crítica al sistema de control tributario anterior.
Describió como persecutorio y poco efectivo, mientras defendió las reformas que, según dijo, buscan simplificar y proteger el ahorro de los ciudadanos.
El cambio de paradigma: de la «persecución» a la «inocencia fiscal»
El ex titular de ARCA (Administración Federal de Ingresos Públicos), Juan Pazo, utilizó una contundente analogía para describir el sistema impositivo previo. En una entrevista con Radio Rivadavia, calificó ese modelo como un «régimen soviético» donde «se trataba a todos los ciudadanos como delincuentes».Según Noticias Argentinas, Pazo contrastó ese enfoque con la nueva lógica: «Pasamos de un régimen persecutorio donde todos eran culpables hasta que ARCA demuestre lo contrario a un régimen de enfoque recaudatorio donde todos somos inocentes y libres de disponer el fruto de nuestro esfuerzo». Para el exfuncionario, el viejo sistema, enfocado en recabar datos masivos e irrelevantes sobre gastos mínimos, impedía perseguir la «informalidad sofisticada».
Las reformas: simplificación, privacidad y acceso al crédito
Pazo detalló los pilares del proyecto de reforma tributaria. Uno de los ejes es el régimen simplificado de ganancias, una herramienta que automatiza declaraciones y, según él, garantiza la privacidad de los consumos. «A partir de ahora, para quienes adhieran al régimen, se hacen anónimos los gastos personales», explicó, describiendo un sistema donde ARCA presenta un cálculo preliminar y el contribuyente solo revisa y edita. El exjefe de la agencia recaudadora vinculó estas medidas con un objetivo mayor: el regreso a la economía formal como paso indispensable para que la población recupere el acceso al crédito. «No puede ser que en este país vos te compras un par de zapatillas en 24 cuotas y una casa al contado; esto es lo que le permite a la gente este proyecto», argumentó.
Una gestión con hitos y una renuncia anunciada
Durante su exposición, Pazo también hizo un balance positivo de su gestión, resaltando que la administración actual logró reducir la presión tributaria en más de 2.5 puntos del PBI, algo que presentó como un hito histórico. Finalmente, justificó su renuncia al cargo tras dos años, presentándola como un acto de «normalidad republicana» y un regreso planificado a la actividad privada. «Siempre dije que iba a acompañar en este proceso por dos años. Es bueno entender que la gente puede venir a aportar del sector privado al sector público y no que se eternice en un cargo», concluyó, agradeciendo la oportunidad al presidente Javier Milei y al ministro de Economía, Luis Caputo.




