El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, expresó su decepción por la postergación de la firma del acuerdo de libre comercio entre el Mercosur y la Unión Europea (UE), tras más de dos décadas de negociaciones.
Sin embargo, durante su discurso en la 67° Cumbre del Mercosur en Foz de Iguazú, el mandatario mantuvo el optimismo y aseguró que los líderes europeos se comprometieron a formalizar el tratado en enero próximo. Lula esperaba concretar la firma este sábado, en un acto que consideraba clave para enviar un mensaje de multilateralismo. La información sobre sus declaraciones fue recabada por la Agencia Noticias Argentinas (NA).
La carta europea y el pedido de más tiempo para la protección agrícola
El motivo de la postergación, según explicó Lula, fue un pedido formal de los líderes europeos. En una carta, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, y el presidente del Consejo Europeo, António Costa, solicitaron más tiempo para discutir «medidas adicionales de protección agrícola» dentro del bloque comunitario. «Lamentablemente, Europa aún no se ha decidido», manifestó el mandatario brasileño ante sus pares del Mercosur. Pese al aplazamiento, la comunicación estableció un nuevo plazo concreto: la firma del ambicioso acuerdo de asociación está prevista para el mes de enero.
La confianza de Lula: «Si falta solo Francia, no podrá bloquearlo»
Confiado en la voluntad política europea, Lula reveló detalles de una conversación telefónica con la primera ministra italiana, Giorgia Meloni. «Ella me dijo textualmente que a principios de enero estará lista para firmar», afirmó. Esta declaración es fundamental para la estrategia brasileña, ya que despeja uno de los obstáculos históricos. Lula argumentó que, con el apoyo de Italia y el compromiso de las instituciones comunitarias, la oposición de un solo país como Francia sería insuficiente para frenar el pacto: «Si ella firma y solo falta Francia, según Von der Leyen y António Costa, no habrá posibilidad de que Francia por sí sola bloquee el acuerdo».
Un Mercosur fortalecido que «el mundo busca»
Más allá de la frustración por la demora, Lula aprovechó la cumbre para destacar la fortaleza comercial actual del bloque sudamericano. Reveló que solo en los primeros diez meses de 2025, el flujo comercial externo del Mercosur superó los 630.000 millones de dólares. «El mundo busca al Mercosur», sentenció, subrayando la importancia estratégica de diversificar alianzas para la resiliencia económica. Además, informó que en las negociaciones se aceptaron cláusulas de protección, como cuotas para productos agropecuarios y un mecanismo de salvaguardias, alcanzando un entendimiento que consideró «ventajoso para ambos lados». La cumbre cerró con la expectativa puesta en el primer mes de 2026 para sellar un acuerdo histórico.




