Con un fuerte apoyo en las redes sociales, Sofía Yosa fue elegida por una conocida marca de ropa.
La historia de Madeline Stuart, la joven australiana con síndrome de Down que logró desfilar en la semana de la moda de Nueva York, conmovió al mundo entero. Esta vez, fue una chica argentina con esa condición la que pudo cumplir su sueño. Sofía Yosa tiene 22 años, vive en Palermo, y se convirtió en una de las caras de una reconocida marca de ropa.
Es educadora ambiental de la ONG Cascos Verdes. Pero siempre le gustaron las cámaras y las pasarelas. Ya había participado en desfiles junto al diseñador Benito Fernández, y esta vez fue por más. Decidió participar en el concurso «47 Street te busca», junto a más de 30.000 chicas deseosas de convertirse en modelos.
Fue al casting y resultó preseleccionada, ya que su perfil estuvo entre los 100 más votados en las redes sociales. Sin embargo, el jurado no la eligió. Pero Sofía siguió intentando, fue a un nuevo casting y nuevamente entró a la semifinal. «Ese día, cuando entré a la página web y vi que tenía miles de votos… qué emoción. Siempre quise ser modelo. Es difícil a veces encontrarte con los prejuicios. Pero cuando te encontrás con alguien que no los tiene, con que la gente te elige como sos, se siente hermoso», contó la joven .
Una vez más, el jurado no la tuvo entre sus favoritas. El rechazo entristeció a la participante y movilizó a numerosas personas a través de las redes sociales. «Sofia Yosa era la que tenía más votos, exijo saber por qué no es finalista. ¿Tener síndrome de Down excluía?», increpó Paula Castronovo en Facebook. También las ONG participaron. «¡Votá a Sofía para que cumpla su sueño de ser modelo!», tuiteó con insistencia la asociación Best Buddies Argentina. «Ayudá a Sofia Yosa a ser una de las preseleccionadas», compartió Downeate.
El reclamo fue tan fuerte que la marca decidió incluir a Sofía de alguna manera entre «sus caras». La joven hizo una producción de fotos junto a la modelo Candela Ruggeri que se podran ver –a partir del lunes– en locales de los shoppings porteños. Van a promocionar dos remeras especiales, con el lema “inclusión, evolución”, que saldrán a la venta. Lo recaudado será destinado a fundaciones que ayudan a personas con Síndrome de Down.
«Es una iniciativa innovadora, es algo novedoso en Argentina que una joven con síndrome de Down sea modelo de una marca de indumentaria», dijo Kevin Kogan, responsable de marketing de 47 Street. «Creemos que esto va a tener un impacto muy importante entre adolescentes y estamos orgullosos de poder utilizar la moda como herramienta de comunicación de valores positivos”, concluyó.