La familia presidencial redujo los consumos de luz y gas en la Quinta de Olivos, aunque la suma total por el pago de servicios públicos es mayor que cuando la usaba Cristina Kirchner debido al tarifazo; en cambio, gasta cada vez más agua.
Curiosidades del cambio de modelo económico. Los aumentos de gas, agua y electricidad que dispuso el gobierno de Mauricio Macri para recomponer la ecuación de las empresas de servicios públicos y reducir los subsidios del Estado le incrementaron exponencialmente el tamaño de las facturas que debe pagar en su propia casa, la Quinta de Olivos, pese a que en varios ítems muestra una inclinación al ahorro mayor que la anterior inquilina del predio, la ex presidenta Cristina Kirchner. Así se desprende de un relevamiento que hizo La Nación Data en base a varios pedidos de acceso a la información y documentos oficiales.
Si bien la Secretaría General de la Presidencia, a cargo de Fernando De Andreis, es la responsable de administrar el complejo y por lo tanto paga las boletas, naturalmente se cubren con fondos públicos que aportan los contribuyentes a través del pago de impuestos.
El abundante verde que recorre a la residencia es quizás uno de los principales motivos por los cuales el agua constituye el servicio más oneroso para el Presidente. Tan sólo en los primeros 10 meses del año debió pagar $ 2,2 millones, por encima del $ 1,3 millón que desembolsó en 2016. En ambos casos, las boletas de Macri están muy por encima de las últimas facturas de Cristina Kirchner, que mantuvo como política pública contener al máximo los aumentos de servicios públicos a cambio de un costo fiscal cada vez mayor.
En el último año de la ex Presidenta en Olivos la factura total de Aysa había sido de $ 659.521. De manera que en 2016 Macri pagó un 103% más. Y este año el incremento, en términos comparativos, será aún mayor.
Si se mira el consumo, los administradores de la Quinta de Olivos están especialmente interesados en que los parques luzcan en todo su esplendor. Quizás por eso pasaron de consumir los 105.015 metros cúbicos (m3) anuales de la época de Cristina Kirchner a los 105.165 m3 del año pasado y los 105.478 de los primeros cinco bimestres de 2017. Es el único servicio que registra un aumento en el consumo.
Fuente: lanacion.com