La multitudinaria marcha que se realizó ayer en la Plaza del Congreso tuvo como premisa, en carteles, cantos y consignas:
«Educación sexual para decidir, anticonceptivos para no abortar y aborto legal para no morir».
El senador nacional Alfredo Luenzo manifestó al respecto:
“no es solamente la cuestión del aborto, es la mirada retrógrada que algunos tienen respecto del tema.
Hoy mueren miles de mujeres en Argentina.
Tenemos que dar un paso adelante en este contexto y debatirlo con toda franqueza porque es un tema delicado y sensible”.
Y apuntó: “soy un convencido que hay que avanzar rápidamente con esta ley y darle a la sociedad en su conjunto la posibilidad de comprometerse y de decidir.
Hay que terminar con la hipocresía.
Por supuesto que es necesario informar y educar para evitar el aborto pero tenemos que tener la posibilidad de que sea legal y no exponer a tantas mujeres a esta situación de riesgo que muchas veces termina con su vida”.
Luenzo manifestó la importancia de respetar todas las opiniones “que desde la religión o desde algún otro aspecto político puedan manifestarse en contra.
Pero el debate hay que darlo, será arduo pero absolutamente necesario”.
“Penalizar el aborto no reduce los casos, incrementa los riesgos”, concluyó Luenzo.
En Argentina se practican entre 370.000 mil y 522.000 abortos clandestinos al año, que se han convertido en la principal causa de muerte de gestantes.
La interrupción del embarazo hoy es delito, excepto en casos de violación y de peligro para la vida o salud de la madre.
Los países que legalizaron el aborto tienen índices más bajos que Argentina.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud, mientras que en países donde el aborto es legal hay 34 abortos por cada 1000 embarazos, en los países donde es ilegal, hay 37 abortos por cada 1000 embarazos.
El Patagonico.