Ayer se realizó la audiencia de control de detención y apertura de investigación contra Carlos Hernán Acuña, imputado por el robo a la heladería Grido de Km.3 y por sustraer un espejo de un local del mismo barrio y amenazar a su dueña.
En la audiencia, la funcionaria de fiscalía Camila Sánchez Almirón realizó un breve relato de los hechos a investigar, el primero ocurrido el 21 de agosto, siendo aproximadamente las 19 horas, cuando el imputado Carlos Hernán Acuña se presentó en la heladería Grido ubicada sobre calle Juan Martín de Pueyrredón de Km. 3 y les exigió a las empeladas del lugar que le entregaran el dinero. Seguidamente, sacó una tumbera con la que apuntaba a una de ellas mientras que con la otra mano sacó dinero de la caja, tras lo cual huyó del lugar.
Personal de la Brigada identificó al imputado como el autor del hecho ya que quedó registrado en video.
El segundo hecho ocurrió el mismo día, siendo las 15.30 horas, aproximadamente, cuando el imputado ingresó a otro comercio del mismo barrio y sustrajo un espejo de grandes dimensiones y lo depositó en la caja de una camioneta VW Saveiro, tras lo cual huyó del lugar. La damnificada logró tomar fotos de la patente del rodado y luego de unas horas lo localizó y pidió la presencia policial.
Cuando llegó la policía, la víctima le contó lo sucedido y el imputado comenzó a amenazar, arrojando golpes de puño,procediéndose a su detención y traslado a la dependencia policial.
El fiscal a cargo de la investigación es Juan Carlos Caperochipi.En la audiencia, el defensor Ricardo Amado cuestionó el delito de resistencia a la autoridad porque no se corresponde con el relato del hecho.
La funcionaria solicitó que se declare legal la detención de Acuña y la prisión preventiva del imputado por tres meses, en base a los “elementos de convicción suficientes para tener al imputado como probable autor de los hechos”, mencionando también la existencia del peligro de fuga por falta de arraigo de Acuña, como las características graves de uno de los hechos en el que utiliza un arma de fuego. También se dio el peligro de entorpecimiento ya que “su soltura puede influir sobre los testigos”, argumentó la funcionaria.
En contraposición, el defensor cuestionó el informe de la Brigada. la investigación es incipiente y no hay elementos de convicción suficientes. Deben traerse datos concretos. “La prisión preventiva es excepcional y para casos concretos”, dijo, mientras que “el domicilio quedó suficientemente acreditado con los familiares presentes en la sala. El peligro de entorpecimiento no es vivir en el mismo barrio. El caso es excarcelable y en caso que se le imponga condena, la misma va a ser en suspenso”, aseguró el defensor, oponiéndose a la prisión preventiva ya que según él “no está debidamente fundada”.
Solicitó la libertad de su asistido y en caso de corresponder una medida sustitutiva pidió que se ordene la prohibición de acercamiento a las víctimas como así también presentaciones periódicas ante la autoridad.
Finalmente, la jueza penal Mónica García resolvió informar al imputado de la investigación que la fiscalía ha comenzado en su contra, declarando legal la detención de Acuña, ordenando la prohibición de acercamiento del imputado a las víctimas y finalmente la libertad del imputado, fijando el plazo de investigación en el plazo tres meses.