El ministro de Economía, Nicolás Dujovne, anuncia un paquete de medidas para aumentar ingresos, achicar gastos e intentar llegar al equilibrio fiscal en 2019, antes de viajar a Washington a negociar una aceleración de la ayuda financiera con el Fondo Monetario Internacional.
El programa económico incluye el regreso de las retenciones a todas las exportaciones, la puesta en suspenso de reducciones impositivas pautadas en la reforma tributaria y un recorte adicional del gasto público, además del recorte de ministerios. Del otro lado, el Gobierno implementará un programa de contención social, con un bono extra a los beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo (AUH).
Además, Dujovne presentará los esbozos del programa financiero 2019. El Gobierno espera reducir la brecha a cubrir en el mercado, que los privados estirban a u$s15.000 millones, hasta los u$s2500 millones.
La meta del Ejecutivo es lograr el «equilibrio fiscal» en 2019. Eso implicaría un ajuste de 500.000 millones de pesos. El programa acordado con el Fondo supone la posibilidad de aumentar el gasto en 0,2 puntos del PBI para asistencia social.
La decisión oficial es implementar retenciones de 4 pesos por cada dólar exportado en las exportaciones primarias y de 3 pesos por dólar en el resto de los envíos, con valor agregado. Además, se interrumpirá la reducción gradual de las retenciones a la soja, que actualmente estaban en 25,5%. En cambio, se aplicará una retención del 18% para porotos, harinas y aceite de soja.
Además, se suspenderá por un año la suba del mínimo no imponible en las contribuciones a la Seguridad Social prevista para 2019. Con esto, se espera un ahorro adicional de unos 40.000 millones de pesos.
Estos son los principales conceptos de Dujovne.
«En las últimas semana la volatilidad internacional recrudeció nuevamente y tuvimos que enfrentar la incertidumbre de los cuadernos de la corrupción kirchnerista».
«En ese momento hemos decidido converger al equilibrio fiscal en 2019».
«Bajando el déficit bajamos nuestra necesidad de emitir deuda y de esa manera dependeremos menos de lo que ocurre en el mundo».
«Llegamos a un entendimiento (con el FMI) acerca de la necesidad de modificar el programa que tenemos en vigencia, de manera tal de adelantar desembolsos y despejar cualquier tipo de duda sobre el financiamiento de la Argentina para 2019 en un contexto de un mundo más exigente y al que le queremos mostrar que no necesitamos financiamiento. Esto nos va a proteger de una manera muy fuerte y estaremos tomando los recaudos por si nuevos eventos internacionales complican la situación».
«En 2019, en vez de apuntar a una meta de déficit de 1,3% del PBI vamos a converger a una meta de déficit cero. Eso implica un ahorro de 6000 millones de dólares más que no vamos a financiar en los mercados. Y en 2020 vamos a tener un superávit primario de 1 puntos del PBI que nos va a ahorrar otros 5500 millones de dólares».
TN