El ente electoral de Bolivia rechazó las impugnaciones a la candidatura de Evo Morales
El órgano electoral de Bolivia rechazó impugnaciones a la candidatura del presidente del país, Evo Morales, de cara a las primarias para las elecciones de 2019, presentadas por políticos opositores e incluso por inscritos como militantes de su partido.
El Tribunal Supremo Electoral de Bolivia comunicó estas resoluciones denegando los recursos de impugnación a políticos opositores como el diputado Wilson Santamaría, de Unión Demócrata (UD).
Otro de los diputados que recibió la comunicación de rechazo fue Rafael Quispe, también de UD, quien había presentado el recurso aprovechando un error del censo de militantes de partidos políticos, en el que había aparecido inicialmente en las filas del Movimiento al Socialismo (MAS) de Evo Morales.
El tribunal electoral detectó inscripciones erróneas de numerosos militantes, para las primarias del próximo 27 de enero, que fueron progresivamente corregidas, en el caso de Quispe eliminándolo de las filas del MAS.
Los recursos a los candidatos de cada partido solo pueden presentarlos sus propios militantes y el MAS denunció infiltrados en sus filas como Marcel Rivas, cuya impugnación también fue denegada al entender el órgano electoral que incumplió el procedimiento establecido.
Evo Morales fue habilitado por el tribunal electoral la pasada semana en medio de protestas de oposición y movimientos ciudadanos.
La mayoría de miembros de este órgano determinó que Morales está habilitado por una sentencia del Tribunal Constitucional de Bolivia, que en 2017 autorizó la reelección indefinida de cargos en el país.
El órgano electoral argumentó que este fallo prevalece sobre un referéndum que en 2016 rechazó una reforma constitucional para eliminar el límite de dos mandatos consecutivos.
Morales, en el poder desde 2006, ya fue habilitado para un tercer mandato al establecer el Constitucional que su primero no contaba porque en 2009 Bolivia se refundó de República a Estado Plurinacional.
El mandatario se ha convertido en el presidente con más tiempo en el poder en su país y de ganar los próximos comicios gobernaría hasta 2025, bicentenario de la independencia de Bolivia.