El intendente de 28 de Julio y precandidato a gobernador de Chubut por el Partido Justicialista manifestó en diálogo con La Portada su rechazo a la megaminería. “No genera ningún tipo de desarrollo”, aseguró. Asimismo opinó que “el gobierno provincial sembró una crisis para que la gente visualice esta actividad como un salvavidas”.
A su paso por Esquel, Omar Burgoa visitó la redacción del diario para confirmar su precandidatura a gobernador de Chubut por el Partido Justicialista y en este marco brindó una charla sobre la megaminería y sus consecuencias para fijar posición. “Nosotros nos oponemos a la megaminería y explicamos porqué. Creemos que es firmar un cheque en blanco porque puede ser que ocurra algo gravísimo y los únicos perjudicados vamos a ser los chubutenses”, explicó. Sin embargo señaló que el resto de la dirigencia todavía no se ha expedido de cara a la sociedad sobre cuál es su posicionamiento e instó a que lo hagan. “Es legítimo que alguien esté a favor pero queremos saber por qué y eso no lo está haciendo ninguno”, agregó.
Sostuvo, además, que sería “un pésimo negocio para la provincia de Chubut” y citó como ejemplo el yacimiento de Navidad. “Es el más grande del mundo y si esto no es un vector de desarrollo, que acarrea un enorme riesgo ambiental, es de sentido común darnos cuenta que no podemos estar a favor de la megaminería”, planteó. Al mismo tiempo resaltó que la actividad “no propone un desarrollo sustentable en términos industriales y no va generar un plan de obras complementarias, como tampoco lo han hecho otro tipo de iniciativas que tienen que ver con la extracción de recursos no renovables -petróleo-”. De esta manera aseguró que “la megaminería es un saque económico”.
El precandidato a gobernador afirmó que tiene muy en claro lo que quiere para Chubut. “Yo quiero una provincia desarrollada y la megaminería no supone ningún tipo de desarrollo. Es un crecimiento contingente por treinta años y después tendremos que hacernos cargo del pasivo ambiental, económico y social, que es muy difícil de medir por anticipado, así que ahí está la responsabilidad como dirigentes sociales y políticos de no firmar este cheque en blanco”, indicó.
A principio de año Burgoa participó de una reunión que tuvieron intendentes de la costa y la meseta chubutense con el ministro de Energía y Minería de la Nación, Juan José Aranguren, por la promoción del proyecto minero Navidad. Sin embargo comentó que en ese encuentro se terminó de convencer que no se puede esperar nada de este tipo de actividad y que el Estado Nacional “avala” la intención de las compañías. “Quieren alcanzar este objetivo de la manera que sea”, advirtió. Asimismo opinó que “el gobierno provincial ha cerrado el camino a cualquier otro tipo de desarrollo y sembró esta crisis para que la gente visualice la megaminería como un salvavidas”.
No es No
Burgoa señaló que el pueblo de Chubut ya se ha manifestado en rechazo a la megaminería y que los legisladores deberían respetar la voluntad popular. “Necesitamos que los políticos que uno vota no legislen a espaldas del pueblo que está diciendo que no quiere megaminería en toda la provincia”, remarcó. Sin embargo llamó a la comunidad a estar en alerta por el tratamiento del proyecto de zonificación minera. “La Comisión de Recursos Naturales tiene un despacho que no está firmado por los diputados pero ante cualquier descuido esto puede pasar y tenemos que ver cómo van a actuar. Hay que estar atentos a la orden del día y a que esto no ocurra en las fiestas”, expuso.
Agregó que “la gente, con este telón de fondo de ausencia de políticas nacionales que realmente nos contengan, se da cuenta que hoy más que nunca depende de lo que votemos en Chubut”.
Apostar a la producción
Burgoa aseguró que la provincia no saldrá adelante hasta tanto no diagrame un plan productivo a largo plazo y en serio. “No podemos vivir de la receta de los hidrocarburos, la megaminería o la pesca. Tenemos que apuntar al encadenamiento productivo que genere un valor agregado a cada región y producto por producto”, explicó.
En este sentido sostuvo que hoy la provincia tiene cincuenta millones de presupuesto anual y no destina ni el uno por ciento a la producción. “La gente necesita recuperar la dignidad a través del trabajo”, subrayó.
De esta manera propuso la instalación de complejos industriales en la provincia para que no sólo ocupen mano de obra genuina sino que además permitan el desarrollo de la actividad de manera sustentable. También planteó necesario renegociar los contratos petroleros y exigir la utilización local del petróleo como su aprovechamiento a través de un polo petroquímico. “Tenemos una provincia grande con muchísimos recursos así que hay que hacer algo para preservarlo y que lo que se extrae genere el bienestar de los chubutenses”, finalizó.
Fuente: Diario La Portada Esquel