El vecino de Comodoro, un trabajador petrolero, se cansó de ver las barandas rotas y este año decidió llevar su soldadora y arreglar un problema que los turistas padecían desde hacía años.
Elías Espinoza es un trabajador petrolero que vive en Comodoro Rivadavia, y desde hace cuatro años viaja a Las Grutas todos los veranos junto a su familia. Cansado de ver todos los años las barandas rotas de la rampa de la Primera Bajada, decidió arreglarlas.
Este año decidió cargar su soldadora en el auto y reparar las barandas para que ningún turista termine lastimado. “Lo hice por la integridad física de mis hijos y la de los turistas. Es un problema muy grave para cualquier persona”, manifestó.
Su gesto fue destacado por muchos vecinos y veraneantes, que aseguran que este comodorense “solucionó un problema de años“.
Elías relató a La Mañana Neuquén que el año pasado notó la falta de mantenimiento en distintos sectores y fue por eso que, días atrás cuando se preparaban para viajar, se le ocurrió cargar su equipo de soldadura y su amoladora para hacerlo “de onda”.
El jueves bajó a la playa y advirtió que los caños estaban desoldados. Una mujer mayor descendió por el lugar y, al aferrarse a la baranda, la estructura cedió peligrosamente y por poco se cae. Ahí decidió realizar la tarea. El sábado a las 6 puso manos a la obra y en una hora y cuarto, y con 8 pesos de electrodos, todo solucionado.
Espinoza se presentó en la Delegación Municipal y pidió autorización. Le solicitaron sus datos y le indicaron que lo llamarían. Pero nunca lo hicieron.
ADN Sur/ La Mañana Neuquén