El resurgimiento de estas economías de subsistencia cobran fuerza tras la crisis económica, las familias buscan satisfacer necesidades a través del trueque. La única regla para participar es que los productos no deben superar el valor de 300 pesos, la clave es sin duda saber negociar y encontrar oportunidades. “Lo hicimos por la necesidad que estamos pasando ahora, se trae ropa, comestibles, todo lo que te sobra lo traes y lo podes traer. Un kilo de azúcar, un kilo de yerba, también hay gente que hace facturas y cambia por algo que necesita”, explica Luis integrante del “Movimiento Evita”.
Todos los viernes de 14 a 16hs en alguna plaza de la ciudad, más de 60 personas llevan sus productos para intercambiar. No hay requisitos, simplemente exhibirlos en bolsos o mantas sobre el suelo y comenzar a negociar. En días fríos o muy ventosos se gestiona algún espacio cerrado, club o vecinal para que quienes van con pequeños estén resguardados; en estos casos se pide colaboración con algún producto de limpieza para devolver las instalaciones en óptimas condiciones.
Los primeros trueques
Andrea recuerda muy especialmente el año 2001, “pasó lo mismo que había falta de trabajo, había muchas organizaciones que hacían papelitos que eran como plata que vos comprabas y de ahí sacabas mercadería. Ahora es distinto, hay gente que tienen muchos chicos y vienen a buscar porque hoy en día no podes comprarte una ropa nueva, uno tiene que salir el día a día para llevar el sustento a la casa. Traen verdura, fideos, leche”, cuenta mientras muestra el vestido que intercambió por pantalones.
María Esther cierra la jornada con una buena ecuación, cambió una calza de adulto por un jean para su nieto y estaba negociando un guardapolvo nuevo –con etiqueta- por el que podría obtener un buen cambio. Con la proximidad de las fiestas, las chicas acercaron zapatos de vestir y aseguran que se pueden encontrar excelentes regalos para poner en el arbolito de navidad. Esta práctica ancestral que desde hace más de un año volvió a los barrios Comodoro reúne vecinos y traza lazos de solidaridad; lo que nos sobra y lo que necesitamos. Informó Diario ADNSUR