El Presidente advirtió por “la inflación autoconstruida” y reclamó “responsabilidad social” a los empresarios. No descartó aplicar la Ley de góndolas.
En el último día del año, y cuando vence la exención del IVA a los productos de la canasta básica alimentaria, el presidente Alberto Fernández cuestionó este martes el nivel de ganancias de los grandes supermercados y les pidió que absorban parte de ese impuesto.
Además, dejó definiciones sobre varias cuestiones de la coyuntura económica, como el cepo al dólar, la balanza de pagos del Estado y los aumentos en las jubilaciones.
En cuando a las ganancias de los supermercadistas, Fernández cuestionó la “inflación autoconstruida, una inflación que en realidad en verdad no existe pero algunos para prevenirse, precaverse, aumentan los precios ante la duda”, y advirtió que «el Estado tiene herramientas para actuar» al respecto.
“Estamos pidiendo que parte de ese 21% lo absorban, porque tienen que ver con esas utilidades desmedidas. En verdad, tenían IVA cero pero no tenían precios controlados. Muchos de esos precios han subido. Eso le estamos pidiendo a las cadenas de los supermercados. Tienen que revisar un poco su conducta”, aseguró.
En una extensa entrevista con radio Continental, el mandatario agregó que “sería bueno que asuman responsabilidades sociales ante subas desmedidas”. «Es más una tarea de docencia que un reproche, porque esto ocurre hace años. Es un país con un historial inflacionario tremendo. Es el síndrome del alcohólico recuperado. Remarcan precios por las dudas: lo hacen todos porque tienen miedo de ser el tonto que pagó los platos rotos. Es una ganancia innecesaria. Que el esfuerzo sea no ganar tanto», sostuvo.
“Tengo todas las herramientas para actuar, el Estado tienen todas las herramientas. Y si tengo que actuar, actuaré. Quisiera responsabilidad de los empresarios. Y lo que tiene que entender la gente es que me voy a poner del lado de ellos”, añadió.
En ese marco, afirmó que la ley de góndolas «es un mecanismo formidable», y dijo que analiza la posibilidad de impulsarla. «Estoy simplemente esperando que se reinicie la actividad parlamentaria y cómo reaccionan los supermercados. Que no incrementen precios por encima de lo razonable», subrayó.
De todas formas, aclaró, «tampoco es posible que haya que llevar (a los supermercadistas) a los latigazos, porque también son parte de este país».
Consultado sobre el impacto de la devaluación en los precios, el mandatario aseguró que, en el caso de los productores de alimentos, «no tienen insumos en dólares».
Jubilaciones y salarios
«Los jubilados han sido muy maltratados en este tiempo. Sé que muchos de ellos no nos votaron porque se enojaron con los modos de Cristina (Kirchner)… pero no me importa. Hay que ayudarlos a salir de esta situación. Lo que hizo Macri es de una irresponsabilidad supina: les cambiaron la fórmula poder mandarle a María Eugenia Vidal 100 mil millones de pesos para la campaña de la Provincia».
«Detesto la mentira. No soy como Mauricio Macri. Su fórmula es impagable y el salario real de un jubilado cayó. Vamos a seguir aumentándoles con toda la generosidad que podamos. No voy a congelar las jubilaciones, pero pusieron una fórmula de imposible cumplimiento. Ahora uno tiene que ordenar el tema. Macri se fue y dejó todo este bodrio. Yo me hago cargo. No pienso hablar de la herencia, pero por favor entiendan las dificultades del problema».
«Las paritarias podrían ser por partes, a partir del 31 de marzo. Quisiera recuperar el salario real que se perdió durante el gobierno de Macri, que fue del 20 por ciento. Pero también hay que entender que nos metieron en la cancha perdiendo 5 a 0».
Ajuste fiscal
«Nos hemos puesto un deadline como para tener en claro cómo funciona la economía y juntar datos que hoy no tenemos. La fecha es el 31 de marzo. A partir de ese momento estaremos en condiciones de proyectar todo. La economía está llena de sorpresas. En todos lados de la administración me aparecen deudas impagas. Pasa en materia de salud, de publicidad en los medios… a todo hay que encontrarle una solución. Y eso no figura en el déficit. Quiero saber a ciencia cierta cuál es la deuda que el Estado tiene».
«Estamos trabajando en tranquilizar la economía. Esto exige ordenar los números del Estado. No tengo ningún empacho en decir que soy muy cuidadoso de las deudas públicas. ¿Qué es el ajuste? ¿Poner en orden las cuentas públicas? Si es así, hicimos un ajuste. Pero el ajuste no lo pagaron los que menos tienen. Lo pagaron los que están en mejor situación: el campo, las mineras, el petróleo, los que tienen bienes en el exterior… Por eso quiero ser franco y sincero: hemos volcado a los que menos tienen dinero para que estén mejor. Mi obsesión es terminar con el hambre. Pido sensatez, que todos tengamos en claro el punto de partida y la necesidad que tenemos de tranquilizar la economía».
Deuda
«Todo lo que estamos haciendo es planificado; no hay improvisación. Estamos negociando, pero nadie va a jugar mostrando las cartas que tiene. A todos les pido paciencia hasta el 31 de marzo. Ahí voy a tener el escenario decidido».
Cepo al dólar
«El cepo tiene que seguir porque en la Argentina no hay dólares. El cepo lo puso Macri, eh. Yo lo he criticado siempre. Tengo amigos que viajan y me dicen cosas horribles. Estamos viendo qué alternativa tener para que no afecte las inversiones. Hay que entender que el dólar es un bien. Y cuando un bien falta, ¿qué pasa? Es caro. Es una historia de siempre y no se va a cambiar de una noche a la mañana. Me resulta antipático, pero bueno. En el Banco Central quedan disponibles 10 mil millones de dólares… no hay mucho espacio para bajar el impuesto».
«Están viniendo inversiones: no es una lluvia de dólares, sino ir recuperando de a poco la confianza para que el inversor crea. Poco a poco van a ir apareciendo. Están subiendo los depósitos en dólares. Todo va a ser paulatino».
Mensaje de Fin de Año
«Tengamos confianza, dejemos de lado las diferencias y pensemos en los que más necesitan. Somos un pueblo maravilloso que se cayó y se levantó muchas veces. Ojalá que esta sea la última vez que nos levantemos. Como decía Mario Benedetti: de aquí en adelante solo queda ir mejorando».