El presidente Alberto Fernández se convirtió hoy en el tercer jefe de Estado argentino recibido por el papa Francisco, desde su elección como máxima autoridad de la Iglesia, en marzo de 2013. La reunión comenzó a las 10.30 locales [6.30 de Argentina] con un saludo en la Sala del Tronetto, en el segundo piso del Palacio Apostólico del Vaticano, y finalizó 44 minutos después, en medio de un clima distendido.
Luego de un diálogo a solas en la Biblioteca Privada tuvo lugar el intercambio de regalos entre ambos. Francisco le entregó un mensallón, una escultura con forma de medallón que simbola la paz, y sus cinco escritos como Sumo Pontífice. Además, le firmó la exhortación Christus Vivit, y el mensaje de la Jornada Mundial de la Paz de este año, que le dijo que lo había firmado ayer.
Por otro lado, Fernández le obsequió un busto del Negro Manuel, un personaje íntimamente relacionado con la Virgen de Luján, patrona de la Argentina y figura venerada por el Papa.
El «negrito» Manuel fue un esclavo africano que fue adquirido en Brasil para realizar en 1630 un viaje a Buenos Aires junto a dos imágenes de la Virgen María que debían llegar al norte del hoy territorio argentino. Cuando la carreta tirada por bueyes de su expedición se estancó a orillas del río Luján, una caja con una de las imágenes de la Virgen, pequeña, de 38 centímetros, de terracota pintada, debió quedarse allí, para que la misión siguiera adelante con la otra. Y el Negro Manuel se quedó allí con esta Virgen, que comenzó a atraer peregrinos, sirviéndola como «ama y señora» hasta el día de su muerte.
Tal como él mismo adelantó hace unos días a través de Twitter, el Presidente le llevó también un telar realizado por Daniela y Diego, dos chicos con discapacidad, miembros de la Asociación Civil Granja Andar, que lo visitaron días atrás en la Casa Rosada. A esto se sumó «Ellas», un calendario inclusivo, de la misma entidad, que hasta hoy no había trascendido.
Además, le entregó un libro antiguo sobre cafés y bares notables de la ciudad de Buenos Aires, señaló La Nación.